Roban la sede de un colectivo LGTB durante la celebración del Orgullo en Madrid
Mientras se celebraba en Madrid el Orgullo LGTB, el pasado sábado 5 de julio, la sede del Colectivo de Gays, Lesbianas, Transexuales y Bisexuales de Madrid (COGAM) estaba siendo desvalijada. Según ha denunciado la propia asociación, “esta mañana, los trabajadores al entrar en las oficinas se ha han encontrado todo revuelto, con las cerraduras reventadas y y las huchas de donativos abiertas y el dinero desaparecido”.
La presidenta de COGAM, Esperanza Montero, ha puesto el acento en el daño que se le hace a una agrupación como la suya al robarle el dinero que les ayuda a sustentar sus proyectos: “Sobrevivimos gracias a las aportaciones de los socios y de muchas personas que colaboran económicamente para continuar con este proyecto común de igualdad real y respeto a la diversidad”, ha dicho. Al mismo tiempo que las carrozas paseaban las reivindicaciones desde Atocha a la plaza de Colón y un millón de manifestantes sostenía las peticiones de igualdad, varias personas aprovechaban la noche de fiesta para hacerse con el botín.
De todas manera, Montero ha descartado que se trate de un acto de odio. “Es un golpe moral duro, con todo, porque han aprovechado el momento en el que nos estábamos manifestando por el derecho de muchos”. Además del dinero que aún estaba en huchas que se vieron durante la semana de celebraciones y que ascendía a unos 1.500 euros, “también se han llevado material informático”. Siete máquinas en total.
El vicepresidente de COGAM, Ronny de la Cruz, contaba que “la policía trabaja con la hipótesis de que dos ladrones se han colado por la salida de emergencia que da a un patio interior. De alguna manera han inhibido la alarma porque la empresa no nos ha comunicado nada y se han llevado lo que han querido después de reventarlo todo”.
El Orgullo LGTB de 2014 ha avanzado entre trabas desde el anuncio de sus fechas y su programa de actos. La más acusada ha sido la de las restricciones por parte del Ayuntamiento de Madrid para conceder permisos especiales tanto en la regulación del ruido como los espacios solicitados para realizar la fiesta. De hecho, el Gobierno de Ana Botella exigió que se cumpliera el límite de 55 decibelios durante el pregón con el que arranca el Orgullo en la plaza de Chueca.
“Este robo ocurre cuando estamos en una situación delicada”, analiza la dirección de COGAM. “Casi no contamos con apoyo insititucional y tratamos de mantener los programas de atención a enfermos de VIH, las pruebas precoces de detección del virus, las charlas didácticas, la atención a víctimas de agresiones LGTBfóbicas...” se han lamentado.
Montero, tras reiterar que cree que el robo no va más allá de la motivación económica, ha querido agradecer “a todas las personas que se han acercado a ayudar a limpiar y a los que están haciendo donativos al enterarse de la noticia para tratar de reponernos de la situación”.