El “prioritario” tramo ferroviario Algeciras-Bobadilla sigue 'pintando' poco en los presupuestos del Estado
Si la partida de 20 millones en los Presupuestos Generales del Estado del año pasado para la conexión ferroviaria Algeciras-Bobadilla conllevó descalificativos desde los diferentes grupos políticos, incluido el PP, la que 'pinta' el Gobierno central para este 2018 no parece que se vaya a llevar demasiados aplausos, teniendo en cuenta que se trata de una obra fundamental para el desarrollo económico del Campo de Gibraltar y Andalucía, según coinciden todos los agentes económicos, sociales y políticos.
De hecho, el Ejecutivo no ha parado de insistir, la última vez hace escasas semanas, en que se trata de “una prioridad” a la que se le pretende dar “celeridad”. Pero la inversión de 28,5 millones en 2018 para una infraestructura ferroviaria señalada desde 2004 como prioritaria para la Unión Europea no parecen suficientes para contentar las expectativas de mejora y renovación de la línea ferroviaria.
En concreto, el proyecto de los PGE de 2018 señala que “el presupuesto de la Secretaría de Estado ha previsto la dotación necesaria para la finalización de los estudios entre Bobadilla y Algeciras, mientras que Adif contempla continuar con la renovación de vía entre Almoraima y Algeciras”. Las cuentas incluyen el acceso a las instalaciones de mercancías de San Roque, la electrificación de la línea Bobadilla-Algeciras y otras actuaciones de mejora en la línea financiadas por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras.
Las partidas se destinarán, según la previsión del Gobierno, para el desdoblamiento y la electrificación de 70 kilómetros de vías, previendo una inversión de 309 millones de euros hasta 2021 y un presupuesto total estimado de la obra de más de 1.300 millones que, como ya informó este medio, alargarían las obras hasta 2077 en el mejor de los casos.
Cinco años del 'Acuerdo de Antequera'
Esta línea ferroviaria, de 176,2 kilómetros y que se considera como una obra fundamental para el desarrollo económico del Campo de Gibraltar y Andalucía según coinciden todos los agentes económicos y políticos, es la salida natural del Puerto de Algeciras hacia Europa, integrada en dos de los nueve corredores ferroviarios europeos (el Mediterráneo y el Atlántico, que atraviesan la península ibérica y que tienen como origen -o fin, según se mire- la bahía agecireña). El consenso en la importancia que se le da desde todos los ámbitos a la mejora de esta conexión tuvo su mejor reflejo cuando numerosas administraciones y entidades públicas y privadas suscribieron en 2013 el llamado 'Acuerdo de Antequera', dirigido a presionar para la optimista “terminación urgente” del eje ferroviario.
El ministro De la Serna dijo el pasado diciembre en Sevilla que el objetivo es culminar en 2020 las obras de plataforma, que comprenden la implantación del ancho europeo por tercer carril, con una inversión de 350 millones de euros, y acometer posteriormente la electrificación.
Las críticas a la inversión prevista para este año no se han hecho esperar. La secretaria general del PSOE de Cádiz y presidenta de la Diputación, Irene García, mostraba este martes su “decepción” ante los presupuestos y lamentaba que de la ejecución de 13 millones en 2017 se ha pasado a una previsión de “solo” 28,5 millones.
