Córdoba, tras el 26J: la sonrisa se quedó en casa del PP
“Cuidado con las encuestas que las carga el diablo. Cuidado con las ensoñaciones”. Las palabras que el excoordinador de IU, Julio Anguita, pronunció en el mitin central de la campaña electoral de Unidos Podemos en Córdoba sonaron –una vez más- a profecía. Y es que ni las encuestas de la campaña electoral ni tan siquiera las realizadas a pie de urna el mismo día de la votación reflejaron los resultados finales, tampoco en la provincia cordobesa.
Los votos de los cordobeses volvieron a calcar el reparto de escaños cosechado en las pasadas elecciones del 20 de diciembre, otorgando dos escaños al PP, otros dos al PSOE, uno para la coalición de Unidos Podemos y otro más para Ciudadanos. Sin embargo, el pulso en número de votos sí ha sufrido un vuelco en este 26J con respecto a los anteriores comicios: los socialistas han perdido en favor de los populares (10.863 votos menos se ha dejado el PSOE), un descenso en número de sufragios que ha sufrido en mayor grado Unidos Podemos mientras que Ciudadanos se ha mantenido en las mismas cifras que el 20D.
La sonrisa de la que la coalición electoral entre Podemos e IU hizo lema durante toda la campaña, en Córdoba se quedó del lado del PP, que fue el único partido que celebró una victoria con los resultados obtenidos. La lista de los populares se impuso en la provincia adelantando así al PSOE y, también y con más amplitud, en la capital, donde sí se esperaba ese resultado de antemano. Un total de 153.421 votos (34,44%) obtuvo el PP frente a los 138.988 de los socialistas (31,20%).
Mientras, del lado de los llamados partidos emergentes, Unidos Podemos es quien ha acusado la caída en votos con respecto al 20D. El mismo único escaños lo ha conseguido con 31.000 votos menos Unidos Podemos con respecto a los logrados por Podemos e Izquierda Unida por separado en los anteriores comicios -84.546 ahora por más de 115.000 antes-. Mientras, en la provincia cordobesa, Ciudadanos ha mantenido el tipo con un resultado en votos prácticamente calcado al de diciembre: 55.052 este 26J por los 55.812 del 20 de diciembre.
Frente a una fotografía similar de los escaños obtenidos por cada fuerza política en Córdoba, las sensaciones eran muy distintas en la noche electoral en cada una de las sedes. La victoria se respiraba sólo en el PP, consciente del “surpasso” con el que su líder andaluz, Juanma Moreno, calificaba el adelanto de los populares a los socialistas. Mientras, en la sede del PSOE, la caída en votos en la provincia se contagiaba también de la pérdida del liderazgo en Andalucía, que sólo se analizaba positivamente como freno a Unidos Podemos. Éstos, pasaron de la sonrisa a la decepción cuando el escrutinio avanzó y el sorpasso se quedó en un espejismo. Y en Ciudadanos, satisfacción por mantener sus resultados y afianzar su posición entre el electorado de la provincia.
El análisis del día posterior, más allá del espaldarazo al PP en la provincia frente al PSOE en consonancia con los resultados de los populares en toda Andalucía, deja también una lectura en clave local en Córdoba. En la capital, se esperaba este 26J con una mirada de reojo desde el Ayuntamiento, donde gobiernan en minoría PSOE e Izquierda Unida apoyados en acuerdos con Ganemos Córdoba desde la oposición. Estos últimos habían aprobado en asamblea esperar a los resultados de estas elecciones para debatir si entrar o no en el gobierno municipal, donde ayudarían así a sumar la mayoría absoluta.
Esa decisión, postpuesta hasta que pasaran estos comicios pero aventada por las expectativas que daban las encuestas a la unión de las fuerzas de la izquierda, queda ahora en suspense. Deberá ser analizada por la asamblea de Ganemos Córdoba como así se había decidido de antemano, pero ahora con los resultados reales sobre la mesa que han mostrado que la alianza de Podemos e IU no ha generado la confianza de los electores tal y como esperaban.
