Las empresas andaluzas de catering en colegios, extraescolares y aulas matinales piden un rescate tras hundirse la demanda

Si complicado fue el pasado curso, cuando se suspendieron las clases por el coronavirus sin haberse completado el segundo trimestre, no lo está siendo menos el presente. El primer trimestre se cerró con unas cifras que han dejado a las puertas de la quiebra a las empresas que prestan servicios de restauración en los colegios, extraescolares y aula matinal. Las patronales urgen a la Junta de Andalucía un rescate para un sector donde predomina el empleo femenino y que está directamente relacionado con el derecho a la conciliación de las familias, pero que ha visto drásticamente recortada la demanda como consecuencia de la pandemia. Por un lado, porque el incremento del desempleo ha hecho que muchas familias hayan prescindido de este servicio, y por otro, porque hay miedo a los contagios.

Desde la Asociación Andaluza de Empresas Educativas, Culturales y Ocio (Aaeeco), que engloba a la mayoría de las que prestan estos servicios fuera del horario lectivo, confirman una caída de la facturación por encima del 80% en el primer trimestre, es decir, entre septiembre y diciembre, lo que ha dejado en el paro a más de 8.500 trabajadores, sobre todo mujeres. De hecho, contaban con 9.056 en nómina cuando no había pandemia, pero hoy día prestan estos servicios con apenas medio millar. “Hemos solicitado que se revisen actuaciones y que puedan mantenerse los grupos de convivencia en las extraescolares, a pesar de que estas puedan estar por debajo de la ratio. Sin embargo, es imprescindible forzar a una reunión con los centros y familias para ir planificando el próximo curso”, apuntan desde la asociación, que cifra en más de 10 millones de euros las pérdidas este año.

Hace unos días se reunían con la viceconsejera de Educación, Carmen del Castillo, con la que abordaron “una revisión de los precios públicos, que están por debajo del precio actual, tras 12 años sin modificaciones”, debido a que se han encarecido una serie de costes que hacen “inviable mantener por mucho más tiempo este servicio”. En este sentido, desde la organización insisten en que continuarán manteniendo esta demanda y reivindicando su lugar en el paquete de ayuda de la Junta de Andalucía como sectores más afectados por la pandemia.

Por su parte, desde la Asociación Empresarial de Restauración Colectiva de Andalucía (Aercan) han remitido unos contundentes datos a la Viceconsejería de Educación, a la que proponen básicamente cinco cuestiones para compensar las pérdidas: la actualización “inmediata” del precio público; la bajada o exención del pago del canon de estos contratos; que se abonen a las empresas las comidas previstas en las concesiones y no las realmente servidas; que se les paguen los gastos que están sufragando como consecuencia de los protocolos covid implantados y que no figuraban en la adjudicación; y también, las indemnizaciones pendientes por la suspensión el curso pasado, según explica José María López, secretario técnico de esta patronal.

Comedores escolares en riesgo

De este modo, por un lado, está la bajada de comensales, que empezó siendo muy notable en septiembre (con un 38% menos de alumnos) para ir recuperándose entre octubre y noviembre, si bien todavía son tres cuartas partes de los que había antes de la pandemia haciendo uso de este servicio. Y por otro lado, la bajada de asistencia con respecto a lo previsto en los pliegos, que de media ronda el 35% entre septiembre, octubre y noviembre de 2020. “Como dato significativo hemos de manifestar que el menor ingreso que supone la bajada de asistencia de niños a los comedores escolares, no se compensa de ninguna forma con el menor gasto de personal, que como media, a supuesto una bajada del el 10 o 15 solamente”, agrega. “Los datos de diciembre y enero no disponemos aún de ellos. De todas formas, ya puedo adelantar que en diciembre fueron algo mejores y en enero, mucho peores, ya que ha seguido subiendo el absentismo escolar a los colegios”, comenta.

La patronal lamenta que la Consejería de Educación y Deporte no les ha dado una solución “y tan solo están mejorando algo las condiciones en los nuevos concursos”. Respecto a los contratos antiguos, actualmente en ejecución o en prórroga, “se está prestando el servicio por parte de las empresas a pérdidas por pura responsabilidad social, debido al enorme descenso de comensales (disminución de ingresos) y al mantenimiento de los gastos”. En la misma línea, recalca que “la situación es insostenible para las empresas” y alerta de que “de no hacer algo de inmediato, la gran mayoría de ellas se verá obligada, muy a su pesar, a dejar de dar el servicio a partir del mes de marzo, por lo que muchos colegios en Andalucía se quedarían sin comedor escolar”.