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El número de cántabros que emigran al extranjero se ha duplicado desde el inicio de la crisis

Los jóvenes emigrantes tienen una edad de entre 25 y 35 años.

Rubén Vivar

El saldo migratorio de Cantabria, al igual que en el conjunto del país, se ha revertido como consecuencia de la grave crisis económica y de las dificultades para encontrar un puesto de trabajo. Por segundo año consecutivo, hay más personas que salen de la comunidad de las que llegan. Según los últimos datos recogidos por el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), durante 2013 vinieron a Cantabria 7.427 inmigrantes, y dejaron la región 9.009 emigrantes, con lo que el resultado es un saldo negativo de 1.583 personas, una cifra muy similar a la de 2012, cuando el cómputo fue de 1.600 personas menos.

De este modo se rompe una tendencia en el flujo migratorio positiva y que ya venía mermándose de forma considerable desde el 2008. Ese año el saldo migratorio fue positivo: llegaron casi 5.500 personas más de las que salieron. Al siguiente ejercicio, en 2009, el resultado fue positivo pero menos de la mitad (2.170 personas más); después apenas 725 y, posteriormente, en 2011, menos de medio millar.

Así, a tenor de esa tendencia y de los dos últimos registros negativos, se pone de manifiesto que Cantabria ha dejado de ser atractiva tanto para los habitantes de otras comunidades españolas como para los extranjeros. Cada vez son más los que ante la alta taso de paro y la precariedad laboral optan por buscar un futuro fuera de las fronteras no sólo de nuestra comunidad sino del país.

No obstante, pese a que la inmigración a Cantabria descendió en 2013 un 5,2%, supone un freno en cierta medida a la dinámica de caída de 2012, año en el que la variación negativa fue del 17,2%. Las emigraciones también disminuyeron, un 4,6%. Con mayores pérdidas se registran los grupos de 25 a 29 años, con -388, y el de 30 a 34 años, con -381. En estas edades encontramos casi el 50% de las pérdidas.

En valores absolutos las llegadas a la región desde otros lugares de España fueron 5.529, siendo las emigraciones 5.743 movimientos. Las comunidades de origen de los inmigrantes son principalmente País Vasco, de donde llega el 24,7%, seguida de Madrid con el 15,8% y de Castilla y León con el 14,6%. Estas mismas regiones, y en el mismo orden, son los principales destinos de la emigración desde Cantabria.

En cuando al extranjero, el saldo con el exterior es un año más negativo y, además, la pérdida es mayor que el año anterior, al alcanzar los -1.369 frente a los -1.035 movimientos de 2012.

De acuerdo a la nacionalidad de las personas, todos los movimientos con el exterior están protagonizados principalmente por extranjeros, son el 84% de las inmigraciones y el 81% de las emigraciones. A pesar de las cifras relativamente bajas de españoles, 309 llegadas y 615 salidas, los saldos de estos son siempre negativos y en 2013 se aproximan cada vez más al de extranjeros, -306 y -494 respectivamente. En este sentido, es destacable que el número de españoles que emigran desde Cantabria se ha duplicado desde el año 2008.

Por lugar de origen y destino, por primera vez nos encontramos con que los dos continentes principales presentan cifras prácticamente idénticas, las inmigraciones de países de la UE suponen el 26,9%, seguidas de aquellas de países de Sudamérica con un 26,6%. En el caso de los países de destino, las emigraciones a la UE son el 37,4%, y a Sudamérica el 37,3%.

Población extranjera

También ha descendido por segundo año consecutivo el número de la población extranjera empadronada en Cantabria, que en la actualidad suman 34.762, un 9,8% menos que hace un año. En la actualidad este colectivo representa el 5,9% de los habitantes de la comunidad, una cifra similar a la de 2008.

Por el contrario, el número de españoles inscritos en municipios de Cantabria que residen fuera del país a 1 de enero de 2014 es de 37.086 personas, lo que supone un aumento respecto al año anterior del 6,9%. Por continente de residencia la mayoría de ellos, el 74,9%, se asientan en América, seguidos de los residentes en Europa que suponen el 22,1%. Por países los que mayor concentración presentan son México (31,8%), Argentina (11,5%), Francia (7,7%), Cuba (6,7%) y EEUU

(5,3%).

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