Los antepasados de los cocodrilos viven en Cuenca
'Agaresuchus Fontisensis' es el nombre del último descubrimiento anunciado esta semana por los investigadores del Grupo de Biología Evolutiva de la UNED, Francisco Ortega e Iván Narváez. El ejemplar ha sido descrito como otro más dentro del grupo antecesor de los cocodriles, gracias también al ejemplar 'Lohuecosuchus megadontos', encontrado a finales del 2015. El nuevo cocodrilo se presentó tras la publicación de su descripción en la revista 'Cretaceous Research'.
En el artículo participaron los miembros del Grupo de Biología Evolutiva de la Uned junto a Christopher A. Brochu de la Universidad de Iowa, en Estados Unidos. El proceso seguido para definir al 'Agaresuchus Fontisensis' comenzó con el análisis de restos procedentes del yacimiento de Lo Hueco hallado en 2007 durante la realización de las obras para el AVE Madrid-Levante. En el hallazgo se encontraron también miles de restos de dinosaurios, tortugas y cocodrilos.
Gracias al descubrimiento de 'Lohuecosuchus' y 'Agaresuchus' se ha identificado un nuevo grupo de los cocodrilos que ha sido denominado como alodapasúquidos, que presenta las formas más cercanas con el antecesor común de los animales. Además, el análisis de los restos han acercado a los investigadores ha proponer la distribución de los primeros pasos de los cocodrilos y también su distribución entre España, Francia y Rumanía.
Por otro lado, el análisis del último ejemplar encontrado ha ayudado a reconocer que los reptiles del oeste de Europa eran diferentes a los de las islas del este, al término de la época del Cretácico. El Gobierno de Castilla-La Mancha ha destacado la importancia del trabajo del yacimiento arqueológico, señalando que debe ser una de las palancas “más importantes” de la creación de empleo, riqueza y dinamismo turístico y cultural en la región.
A finales de 2015, al presentar el descubrimiento del 'Lohuecosuchus megadontos', los investigadores señalaron que los rasgos mostraban un animal que era un potente nadador, pero que podía caminar fuera del agua, con una piel fuerte y también varias filas de huesos. Los dientes del ejemplar eran de unos cinco centímetros, una de las características más destacables del animal. Los alodaposúquidos son un grupo de animales que habitó Europa durante el Cretácico hace ya 66 millones de años, según señalaba National Geographic.