El director general de Caixa Popular sobre la atención a los mayores: “Los tratamos como si fueran nuestros padres”

“Nosotros nos los creemos de verdad, los tratamos como si fueran nuestros padres”, ha asegurado este lunes el director general de Caixa Popular, Rosendo Ortí, al referirse a la polémica por las dificultades de las personas mayores para recibir atención adecuada por parte de las entidades bancarias. En un desayuno informativo celebrado en la nueva oficina de Caixa Popular en la calle de Cirilo Amorós en València, Ortí ha insistido en que la entidad que dirige, cuya filosofía es la de un cooperativa de crédito comprometida con la sociedad, tienen especial interés desde su fundación hace 42 años en la atención a los clientes y ha considerado que la banca se apunta ahora a campañas de “maquillaje” después de que el problema haya sido popularizado por la iniciativa de un jubilado valenciano que ha recogido miles de firmas que reclaman un trato más humano por parte de los bancos.

Ortí ha señalado que en Caixa Popular, que ha registrado un beneficio de 17,5 millones de euros en el ejercicio pasado, lo que supone un aumento del 34%, los clientes pueden elegir si son atendidos presencialmente o por medios digitales. El director general de la cooperativa de crédito valenciana, que cuenta con cerca de 2.800 millones de euros en activos y 70 oficinas, ha calificado de “bestial” la oportunidad que la política de cierre de sucursales, jubilaciones de empleados y “digitalización extrema” de la banca ofrece a una entidad como la suya y ha recordado que, al contrario que el resto, abre un par de oficinas al año, ha creado una decena de puestos de trabajo este año y ofrece el “horario más amplio” del sector financiero.

También se ha referido el director general a la gestión de los fondos europeos Next Generation y ha reiterado las críticas al Gobierno de España y a la Generalitat Valenciana por la falta de información. “El papel que se nos ha dado es cero”, ha señalado. Pese a ello, Caixa Popular ha establecidos acuerdos con consultoras para asesorar a las pequeñas y medianas empresas que necesiten apoyo. Pero se ha quejado: “Sabemos lo que sale en la prensa. No está siendo un proceso transparente”. Como contraejemplo, Ortí se ha referido a la gestión de los créditos ICO, sobre los que ha dicho que la entidades financieras tuvieron “un papel activo”. En ese proceso “sí que estaban las reglas claras”, ha concluido.

Además de la apertura de dos nuevas oficinas, Caixa Popular ha reubicado algunas de su oficinas ya existentes en lugares como Oliva, la avenida de Tres Cruces en Valencia, Puçol o Meliana, para lo que ha contado, según Ortí, con la facilidad de poder ocupar locales abandonados por otras entidades en el movimiento de cierre de sucursales. La reubicación obedece a una reordenación desde el extrarradio a posiciones más céntricas en las ciudades. Adherida al grupo de la Asociación Española de Cajas Rurales, Caixa Popular es ahora, tras el hundimiento del sistema financiero autóctono, “la única de capital íntegramente valenciano”, ha enfatizado. Su expansión fuera de su original área geográfica de Valencia, se centra en localidades de la provincia de Alicante como Alcoi, Ibi, Villena, Dénia y, ahora, Elda-Petrer, evitando coincidir con las zonas de influencia de la Caja Rural Central de Orihuela. La presencia de las cajas rurales en las comarcas de Castellón hace que, de momento, no tengan previsto expandirse hacia esa zona. Ortí ha concluido: “Nuestra vocación es solo la Comunidad Valenciana; no pretendemos abrir fuera”.