El juez pide a Bankia los documentos de los creditos sospechosos a la familia Cotino
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha pedido nueva documentación a Bankia y su matriz, el Banco Financiero de Ahorros (BFA), para que identifique las “operaciones de cualquier tipo con indicio de actuaciones irregulares” que detectó en el grupo antes de la salida de Rodrigo Rato e identifique las que fueron denunciadas ante la Fiscalía Anticorrupción.
Andreu realiza esta petición en un auto, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que solicita informes a Bankia y el Banco de España a petición de los peritos designados por el organismo supervisor en la causa en la que se investiga la fusión y salida a Bolsa de la entidad.
El instructor pide al banco que identifique las operaciones que denunció ante la Fiscalía Anticorrupción, que el secretario del Consejo de Administración de Bankia, Miguel Crespo, cifró en septiembre pasado en un total de 15, algunas de las cuales consistieron en créditos irregulares que Bancaja concedió a la familia del presidente de las Corts Valencianes, Juan Cotino.
El banco concedió al menos 35 millones de euros a una sociedad, Share Capital, en la que tienen participación dos empresas de la familia Cotino, para adquirir viviendas en países de Europa del Este, según detalló Crespo.
También solicita las comunicaciones que Bankia hizo sobre estas operaciones a los organismos supervisores y la documentación que existe sobre las mismas, así como los informes internos, incluidos los de auditoría interna y cumplimiento normativo, y los elaborados por asesores externos que detallan estas actuaciones.
Informes de Lazard
De igual modo, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 reclama a Bankia los informes que recibió del banco de inversión Lazard en España, que se encargó de la valoración de las acciones cuando se produjo la salida a Bolsa. Su presidente, Jaime Castellanos, admitió ante el juez ser “amigo” y “socio” de Rato en varios negocios.
Además, pide información sobre los riesgos que presentaba la cartera inmobiliaria del grupo y una explicación detallada de los “motivos y criterios” del ajuste de reformulación de las cuentas de la entidad en 2011, que pasó de unos beneficios de 309 millones a unas pérdidas de 2.979 millones de euros.
En relación con el Banco de Valencia, pide al gobernador del Banco de España el expediente disciplinario contra la entidad y sus exdirectivos que aprobó su Comisión Ejecutiva, así como el informe complementario que elaboró la Inspección.