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Oltra atrubuye el descenso de quejas a la Sindicatura a los avances del Consell en políticas sociales

La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra

Toni Cuquerella

La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha atribuído la reducción en el número de quejas que la Sindicatura de Greuges ha registrado en los últimos tres años en materia de políticas sociales evidencia a los avances que en este ámbito está haciendo el Consell “llegan a la ciudadanía” tras unos años en que el anterior Gobierno dejó la Comunitat “hecha un erial”.

Oltra, que ha respondido en la sesión de control de Les Corts Valencianes a una pregunta sobre la colaboración entre la Conselleria y la Sindicatura en relación a la contestación de quejas y documentos que esta institución envía, ha incidido en que el número de quejas relativas al departamento que dirige se han reducido en un 72% entre 2014 y 2017.

Esta reducción, ha explicado, es del 61% en el caso de las quejas relacionadas con la gestión de las ayudas por dependencia, y que en años anteriores constituía el origen de una gran cantidad de las reclamaciones que llegaban a la Sindicatura. Entre 2011 había una media de 1.535 quejas al año por este motivo, y entre 2015 y 2017 la cantidad se ha reducido a 591.

En este sentido, ha celebrado que, desde la Sindicatura, en su informe de 2017 se reconoce el esfuerzo presupuestario que se está haciendo en dependencia, lo que ha permitido “paliar graves deficiencias que venían arrastradas por la gestión del antiguo Gobierno” y pasar de 41.000 personas beneficiarias en 2015 a más de 65.000 en 2018.

El informe de la Sindicatura, ha continuado, también valora otras acciones puestas en marcha desde la Conselleria, como el decreto de Acción Concertada para las entidades sin ánimo de lucro, y que da “seguridad” en la gestión de los recursos que atienden a las personas más vulnerables; o las medidas impulsadas para mejorar la respuesta en los casos de responsabilidad patrimonial.

Oltra ha resaltado que el síndic reconoce que la Conselleria cuente con la Sindicatura “para desarrollar políticas como la respuesta en los casos de responsabilidad patrimonial” que son consecuencia de las sentencia del TSJCV que declararó ilegal el copago confiscatorio impuesto por el antiguo gobierno.

Mejoras para agilizar las respuestas

La vicepresidenta ha explicado que, a pesar de la falta de personal para hacer frente a los requerimientos realizados por la Sindicatura, consecuencia de las limitaciones impuestas por el Gobierno central, desde la Conselleria se han impulsado mecanismos para agilizar la respuestas, como la puesta en marcha de un registro electrónico.

Todas las comunicaciones entre la Sindicatura y la Conselleria se hacen, desde el pasado mes de noviembre, a través de la Oficina de Registro Virtual, que ha permitido que la diferencia entre la fecha de registro de salida del Síndic de Greuges y la del registro de entrada en la Administración autonómica se haya reducido de cuatro meses a un día hábil.

Asimismo, las comunicaciones internas se hacen electrónicamente y el Gabinete Técnico, así como la Dirección General de Servicios Sociales y la Subsecretaria, que son los departamentos que más participan en la gestión de las quejas, han visto reforzada su estructura para poder ser más eficientes en la respuesta de las quejas.

“Cuando tengamos suficiente personal para satisfacer en tiempo y forma los derechos de todas las personas en situación de necesidad, podremos también atender mejor las quejas del Síndic”, ha manifestado Oltra, quien ha recordado que existe una resolución parlamentaria aprobada por Les Corts y dirigida al Gobierno central para que permite ampliar la tasa de reposición de los trabajadores públicos.

El problema, ha concluido, “no es de voluntad política, sino de medios materiales y humanos”.

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