El portavoz del PSPV, sobre las peticiones de Oltra de endurecer las restricciones: “Mi mujer también está empeñada en que se cierre no se qué”

La escalada de restricciones aprobadas por la Conselleria de Sanidad y anunciadas por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, forman parte de una escalada de tensiones en el Gobierno Valenciano. La pasada semana, el departamento de la vicepresidenta de Consell, Mónica Oltra, exigía a Hacienda una rectificación de los presupuestos de su conselleria, cuya publicación no se correspondía con lo acordado en las negociaciones, lo que generó un conflicto en la presentación de las cuentas públicas y retrasó su comparecencia, prevista para el miércoles, hasta el viernes por la tarde, con la corrección enviada y una disculpa adjunta del conseller de Hacienda, Vicent Soler.

Esa misma semana el president de la Generalitat anunciaba nuevas restricciones dado el aumento de casos de coronavirus diarios: reducción de aforos y cierre perimetral en varias localidades, sin llegar a anunciar el cierre de la hostelería como en comunidades como el País Vasco. La vicepresidenta manifestaba esa noche en el programa de À Punt A la Ventura su discrepancia con las restricciones, unas diferencias que ya anticipaba en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell. En una entrevista en la televisión pública valenciana, Oltra consideró que las medidas deberían ir más allá -son “insuficientes”- y expresó que su formación política, Compromís, no se siente escuchada en el Gobierno Valenciano. La relación, expresaba “es mejorable”. Las discrepancias en el Ejecutivo autonómico tricolor siempre han existido, pero no se habían mostrado tan claramente en público en seis años de Gobierno.

Este sábado los socialistas valencianos celebraban su Consell Territorial, un acto presidido por su secretario general, Ximo Puig. Antes del encuentro, el portavoz socialista en las Corts Valencianes, Manolo Mata, respondía a los medios de comunicación que las relaciones entre el Gobierno siguen siendo buenas, que lo son con la vicepresidenta y quitaba hierro a las tensiones de estas últimas semanas. La relación, expresaba, es “excelente”, aunque en algunos momentos la vicepresidenta “pueda ver las cosas de otra manera”. “Las medidas que se toman son las que recomiendan los epidemiólogos y aplica el Gobierno Valenciano. Ni Compromís, ni ninguna otra fuerza política, ha planteado medidas diferentes. Mónica Oltra es una persona muy valiosa, un activo muy importante, es vicepresidenta del Gobierno y tiene opiniones. Mi mujer también está empeñada en que cierren no se qué, pero la opinión es la del Gobierno valenciano, que está actuando con rigor”, expresaba el portavoz socialista que insiste en que las decisiones son avaladas por los epidemiólogos y que al Ejecutivo no le temblará el pulso para endurecerlas si es necesario. De hecho, la valenciana fue de las primeras en decretar confinamientos en municipios afectados y cierres del territorio para evitar más contagios durante los días de puente y trabaja con el Gobierno central para

La referencia a la mujer del portavoz parlamentario ha enfadado a Compromís y a la vicepresidenta, que consideran esta mención como una forma de desacreditar la opinión de la número dos del Ejecutivo en base a su género. Una constante en política de la que la dirigente valencianista parece haberse cansado. “Alerta patriarcado”, escribía Oltra este sábado en su cuenta de Twitter, donde adjuntaba las declaraciones de Mata y se quejaba de artículos periodísticos en los que la califican como “desatada” o consideran que debería “arañar sigilosamente” sus partidas presupuestarias.