El PP anima a los alcaldes de Castellón a celebrar actos taurinos “saludables” y “adaptados a la nueva seguridad”
Transformar los actos taurinos “que se hacían históricamente, en eventos saludables con todas las garantías y que se puedan volver a celebrar”. Es la propuesta que ha lanzado el PP de Castellón tras una reunión mantenida este lunes entre su secretario general provincial, Miguel Barrachina, y la Unión de Ganaderos de Levante para analizar la situación del sector taurino. En el encuentro, al que también ha asistido el diputado autonómico Luis Martínez, los ganaderos han expuesto la problemática del sector, totalmente tocado a consecuencia de la crisis sanitaria de la pandemia de la COVID-19.
Barrachina defiende que el sector taurino es “un referente en la creación de empleo en el medio rural, en proteger la ecología y el territorio” y un elemento clave en la defensa de las tradiciones de Castellón. Así, el diputado popular ha animado a los alcaldes a que “de la misma forma que los actos culturales se han adaptado a la nueva situación, ocurra lo mismo con los actos taurinos”. Los populares apuestan por transformar los festejos taurinos en “eventos saludables con todas las garantías y que se puedan volver a celebrar”.
“Sin ir más lejos, un acto celebrado con todas las medidas higiénico-sanitarias en abierto es 20 veces más seguro que un acto con las mismas condiciones, pero en cerrado”, ha agregado. Barrachina ha recordado que en Castellón hay una veintena de ganaderías “que dan trabajo a varias familias y que están desarrollando una labor para asentar a vecinos en contra de la despoblación”. El diputado autonómico apuesta, según ha dicho, por poner en marcha iniciativas para ayudar a garantizar la supervivencia del sector.
La última celebración taurina, en Vila-real y con un alcalde socialista, se saldó con cierta polémica tras las denuncias de Compromís, formación que lamentó que no se mantuvieran las medidas seguridad contra la pandemia (algo que la empresa organizadora negaba).
Los festejos, que contaron con los animales de una ganadería sancionada por el Consell con multas de hasta 90.000 euros y cuatro años de prohibición de actividad por varias infracciones, se celebraron en una plaza portátil durante los meses de septiembre y octubre, mientras varias ciudades valencianas imponían severas restricciones por el repunte de la pandemia. El espectáculo organizado por el Ayuntamiento de Vila-real con motivo de la celebración del 9 d'Octubre tuvo un coste de 24.200 euros.
La nueva regulación autonómica impone limitaciones de aforo, medidas de distanciamiento social y uso de mascarillas obligatorias en los espectáculos taurinos. La normativa, elaborada por la Conselleria de Sanitat, ha propiciado que pocos ayuntamientos o peñas celebren los polémicos espectáculos taurinos, que en algunas zonas de Castellón cuentan con gran arraigo.
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