El paro desciende en Euskadi, pero a costa de aumentar la precariedad y la temporalidad de los contratos
El desempleo se ha reducido el pasado mes de diciembre y en todo 2015, pero la precariedad, el número de trabajadores pobres y el paro estructural (de larga duración) no ha dejado de aumentar. Son las luces y sombras que arroja el balance del mercado laboral vasco el año pasado, que se ha cerrado con 150.017 parados, 15.754 menos que en 2014, lo que supone un descenso del 9,50%. El pasado mes de diciembre, el número de parados ha descendido respecto al mes de noviembre en 1.848 personas, un 1,22% menos.
En cuanto a los contratos registrados en diciembre, el número total ha ascendido a 74.821, de los cuales 4.520 han sido indefinidos y 70.311 temporales. “Es evidente que el desempleo ha descendido a la vez que ha habido un aumento de la precariedad y la pobreza”, ha recalcado el sindicato ELA. El 94% de los contratos realizados en 2015 han sido temporales.
Para Comisiones Obreras, los datos no pueden considerarse positivos a pesar del descenso del desempleo porque se evidencia que la contratación “es temporal, de corta duración y de baja calidad”. Si a ello se añade que la tasa de cobertura de la prestación contributiva por desempleo solo cubre al 22,15%, resulta “preocupante la situación de desigualdad y pobreza”. Mientras, UGT considera que los datos del paro reflejan una “ficticia y mediocre recuperación económica” porque se basa en la “perdida” de derechos de los trabajadores.
Por su parte, LAB ha lamentado que el empleo que se crea es cada vez “más precario y peor pagado” y que el agujero de la Seguridad Social “no deja de crecer”, así como el “continuo debilitamiento” del sistema de protección al desempleo.
Paro estructural
El consejero de Empleo y Políticas Sociales, Ángel Toña, ha mostrado su confianza en que los “síntomas de recuperación” del empleo en cuanto a creación de puestos de trabajo también tengan su traslación en su calidad. Toña no se ha mostrado “complaciente” con los datos y ha reconocido “sombras” provocadas por la “precariedad” y la “evolución del paro estructural”.
Sin embargo, ha considerado que el mercado laboral en Euskadi ha empezado a recuperarse y ha opinado que todo indica que en 2016 se puede mantener esta dinámica de crecimiento.
