El PSOE arrasa en Guadiana del Caudillo, el pueblo cuyo alcalde dejó el PP por Vox y que mantiene símbolos franquistas
- Antonio Pozo fue distinguido, y por ello reprobado en la Diputación provincial, tras recoger un premio de la Fundación Franco junto a otro diputado extremeño del PP
El Partido Socialista se ha impuesto con holgura en Guadiana del Caudillo (Badajoz) tras el fichaje de su alcalde, Antonio Pozo, por Vox.
Los socialistas se han alzado con la victoria con el 41,5% de los apoyos y más de 600 votos, mientras que el partido de Santiago Abascal se queda en cuarto lugar con el 12 por ciento y menos de 200 apoyos. Tiene por delante a Cs (17%) y PP (14%).
Guadiana del Caudillo se había convertido en uno de los ‘feudos’ que luce Vox en sus actos. Así quedó demostrado en la visita institucional que hizo Abascal al ayuntamiento el pasado mes de noviembre, donde fue recibido con honores y firmó en el libro de visitas.
Era un acto que se producía después de que el regidor de este municipio pacense, que también es diputado provincial, anunciara su baja del Partido Popular y su adhesión a la formación de ultra derecha. Justificó su baja del PP “por el abandono que sufrió su equipo municipal tras los ataques sufridos por la izquierda en relación con la injusta Ley de Memoria Histórica”.
Cabe recordar que Antonio Pozo fue distinguido, y por ello reprobado en la Diputación provincial, tras recoger un premio de la Fundación Franco. Acudió junto al entonces diputado regional del PP Juan Antonio Morales a una cena en la que fueron nombrados 'caballeros de honor' de la fundación franquista. Morales fue igualmente reprobado en el Parlamento de Extremadura y en la actualidad es otro de los 'fichajes' que lidera Vox en la región.
Guerra contra la memoria histórica
Al mismo tiempo el alcalde de Guadiana del Caudillo mantiene abiertos varios pleitos contra la Diputación de Badajoz después de que la institución provincial anunciara que los municipios que tengan simbología franquista perderán las subvenciones.
Hasta el momento el Ayuntamiento de este pequeño municipio ha gastado más de 20.000 euros en los diferentes recursos abiertos contra la Ley de Memoria Histórica. Los socialistas denunciaban meses atrás que Pozo tiene tres recursos contencioso-administrativos pendientes, que lleva el bufete Millans del Bosch Abogados. Se trata de una batalla legal por el mantenimiento de los vestigios inconstitucionales y en defensa del topónimo franquista en el nombre del municipio.
Su gestión también se ha visto rodeada de polémica tras blindar con un cristal, e incluso restaurar, la placa franquista que preside la fachada del ayuntamiento, y que exalta la dictadura militar. A la placa le acompaña el escudo del Águila de San Juan y el recuerdo del paso del dictador Francisco Franco por el municipio, en el contexto del Plan Badajoz de regadíos.
A la cuenta de gastos se suma un catálogo de vestigios elaborado por el Consistorio, con el que el equipo de gobierno concluyó en marzo de 2017 (entonces con mayoría del PP) que ninguno de los 82 vestigios de la guerra civil y la dictadura contabilizados en Guadiana incumplen la Ley de Memoria Histórica.