Primera semana de clase en el Antonio Moreno Rosales de Lavapiés después de seis cursos cerrado por obras

El principio de curso no ha sido igual en todos los colegios. Para el Antonio Moreno Rosales, centro público ubicado en la calle Olmo (Lavapiés), este ha sido el del añorado regreso al hogar después de seis cursos con el edificio del colegio cerrado por obras y con los alumnos desplazados a otro centro en el distrito de Carabanchel. La reapertura y el recibimiento de sus 150 alumnos ha sido celebrado con camisetas con la inscripción orgullosa Yo salvé el cole público de Lavapiés.

Durante estos cursos, los alumnos del Moreno Rosales –como se lo conoce comúnmente– han tenido que coger diariamente un autobús en la Ronda de Toledo para acudir a clase en el CEIP Perú, en cuyas instalaciones ha seguido la actividad del centro. El trayecto hasta la parada del bus habilitado suponía para la mayoría de los escolares un trayecto de un cuarto de hora andando, similar o superior al que muchos alumnos de otros centros salvan cada día para llegar a la puerta de su colegio.

La situación ha ocasionado no pocos enfados durante los últimos años entre la comunidad educativa, que ha articulado algunas campañas de protesta ante el cierre, como una recogida de firmas online en el año 2022, y distintas reivindicaciones de los movimientos vecinales de Lavapiés. El Antonio Moreno Rosales ha acogido tradicionalmente un importante contingente de población de origen migrante, razón que algunas familias han visto como causa del desinterés institucional por solventar su problema.

En junio de este año nació OLMO 4, “la radio activa del colegio Antonio Moreno Rosales”, que da buena muestra, con lo aprendido el año pasado, de que el espíritu del cole de Lavapiés está muy vivo, lo que no es poco, ya que cuando en 2016 se conoció la necesidad de cerrarlo para adecuar sus instalaciones a la normativa vigente, se temió por su continuidad del mismo. En el programa, donde se escuchan muchos acentos, se muestra una comunidad educativa sensible, con referencias a actividades como música islámica o Ubuntu, en la que los alumnos de quinto y sexto curso acaban actuando en la pista del Circo Prize.

El Moreno Rosales está ubicado en un edificio histórico de más de 3000 metros cuadrados que data de 1830, conocido como Palacio del Marqués de Molins, que es centro educativo desde hace más de un siglo. Los problemas a subsanar por el Ayuntamiento a través de la EMVS han tenido que ver con los sistemas de protección contra incendios y la mejora de la accesibilidad, entre otros problemas derivados de un inmueble de su antigüedad. El plazo inicial para las obras fue de solo diez meses que, finalmente, se han convertido en seis cursos.