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Almunia: “No podemos hablar solo de déficit y políticas monetarias”

Almunia dice que las investigaciones fiscales a Apple, Starbucks y Fiat "probablemente no sean las últimas"

Aitor Guenaga

Bilbao —

El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable comunitario de la Competencia, Joaquín Almunia, se ha reencontrado esta mañana con los alumnos y directores de la Comercial de Deusto. Y les ha traslado lo que considera los retos en la Unión Europea (UE) para los próximos cinco años. Pero con una idea central: no se puede hablar solo de crecimiento y de políticas monetarias si lo que se pretende en avanzar en la cohesión social y en atajar la “desafección” de la ciudadanía hacia Europa.

Almunia ha admitido que el crecimiento que se va a vivir en el futuro inmediato va a ser “muy débil y frágil” por lo que ha señalado como vital que la Europa de los 28 fortalezca su competitividad. “Europa tiene un posición comercial muy buena”, ha apuntado, pero “los sectores industriales tienen problemas serios de competitividad”. Y se ha apuntado a la receta de la inversión para incrementar esa competitividad, “inversiones productivas y en infraestructuras”, ha precisado. Almunia cree que todavía hay muchas 28 políticas estatales en la UE y ha puesto como ejemplo que se debe abordar ya para avanzar hacia el mercado único el mercado de la energía, el de la economía digital y el reto de la negociación comercial con EE UU, con los Europa mantiene un “intercambio de bienes y servicios muchho mayor que con China” o con los países emergentes.

Pero en su intervención ha apelado a que todo ese trabajo en favor del crecimiento y la competitividad en la Unión debe estar dirigido a la cohesión social y a recuperar la confianza que la ciudadanía ha ido perdiendo a lo largo de la crisis en las instituciones, europeas y estatales. “Hay que distribuir bien los frutos del crecimiento, si no la confianza no va a volver”, ha apuntado, al tiempo que defendía que “no se puede solo hablar del déficit, de políticas monetarias” y del sistema financiero.

Almunia ha reconocido que los políticos no son muy dados a la “autoflagelación” y la “autocrítica”, y menos en público. Pero considera que hay que atajar la desafección ciudadana frente a Bruselas. El vicepresidente de la Comisión Europea puso como ejemplo de lo que se está haciendo mal las políticas comunitarias en relación al paro juvenil. “Es intolerable como tratamos como sociedad a los jóvenes. Hay que trabajar seriamente en un sector que tiene el 55% de paro y no lo estamos haciendo”, admite. “No es justo, es una de las mayores injusticias”, ha apuntado.

Más partidario de “unir que de separar”

Al comentar la política en relación con la innovación, la investigación y el desarrollo, ha considerado “muy triste” lo “fácil que es recortar becas a jóvenes que se van fuera de su país para buscarse la vida”. Almunia defiende el “esfuerzo total europeo” realizado en esta materia, pero critica que el sector privado se haya retraído en este campo. “Ha avanzado más lo público que lo privado por la innovación.

Sobre los posibles procesos de independencia abiertos en Escocia y en Cataluña, Almunia ha sido prudente, aunque ha dejado claro que él es más partidario de “integrar que desintegrar, de unir que de separar”. “Todo es posible resolverlo y encauzarlo”, aunque se ha mostrado muy crítico con aquellos que “menosprecian lo bueno que se ha conseguido” de Europa. Y cree que abrir “vías hacia procesos”.

En el aire quedó la pregunta sobre el futuro del PSOE. Almunia, que fue secretario general de ese partido entre 1997 y 2000, no sin cierta ironía ha asegurado simplemente: “eso mejor para después del fútbol”.

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