Instrucciones para reducir la jornada laboral

Si estás entre ese 65% de currantes que en España trabaja 40 o más horas semanales, habrás mirado con mucho interés el punto del acuerdo PSOE-Sumar que propone reducir la jornada laboral. Y te preguntarás qué tienes que hacer para que te apliquen esas 37,5 horas semanales, e incluso 35 o menos. Hoy vengo en plan servicio público y te traigo una lista con consejos prácticos para conseguir una reducción de jornada en tu empresa. También te valen si ya trabajas menos horas pero es debido a un contrato a tiempo parcial y te gustaría mejorar tus condiciones laborales y tu sueldo sin tener que trabajar más horas. Toma nota, que es imprescindible seguir todos los pasos para que funcione:

1-Afíliate a un sindicato de clase.

…

(cri-cri, cri-cri)

…

Ya está. ¿Lo has apuntado todo? Pues hasta aquí mis consejos laborales de hoy. De nada.

¿Que qué opino del acuerdo de PSOE y Sumar para reducir las horas de trabajo? Me parece buenísimo. Lo aplaudo con entusiasmo. Ojalá salga adelante. Pero hay que recordar una obviedad: los pulsos al tiránico reloj de fichar los han echado (y ganado) siempre los trabajadores, organizados en sindicatos, mediante las armas clásicas de la lucha obrera: la movilización, la huelga y la negociación. Sobre todo la huelga, con algunos hitos históricos como la tan recordada de La Canadiense, hace más de un siglo en Barcelona.

Así ha sido siempre, y previsiblemente así seguirá siendo. Tener un gobierno que defienda la ampliación de derechos laborales y no su recorte, es muy importante, viento a favor. Pero sin una clase trabajadora con fuerza para empujar en esa dirección, se quedará en poco. La propia propuesta que ahora debatimos es solo un papel firmado, que para ser ley necesitará contar con partidos de centroderecha y liberales en lo económico, como el PNV o Junts.

Y si se consigue aprobar, su aplicación práctica encontrará resistencias empresariales y un contexto laboral que no es el de hace cincuenta o cien años, con nuevas formas de empleo no tan fáciles de someter al Estatuto de los Trabajadores, y donde solo unos sindicatos fuertes pueden asegurar su cumplimiento mejor que un trabajador solo frente a la empresa. No por casualidad los sectores y empresas donde ya se ha reducido la jornada son aquellos con más fuerza sindical. También los que tienen mejores sueldos, y en general más derechos sociales. Y según se dice en el acuerdo, una reducción horaria más ambiciosa se dejará al diálogo social entre empresarios y sindicatos.

En todo ese camino hará falta que los trabajadores no nos limitemos a leer el BOE. Si queremos frenar la deriva hiperproductivista e intensificadora, que no se limita a los horarios de trabajo sino que extiende lo laboral más allá de la jornada y del centro de trabajo, colonizando nuestra vida entera, debemos tener inteligencia e imaginación colectivas, pero sobre todo memoria: la de quienes antes que nosotros ganaron derechos utilizando la herramienta más vieja y a la vez con más futuro: la lucha colectiva organizada, el sindicato.

Y el gobierno de coalición, si de verdad quiere que la clase trabajadora disponga de más tiempo para la vida, tiempo de ocio y de descanso, tiempo liberado del trabajo, debería también animarnos a no dejarlos solos. Vamos.