Así describe Correa algunos nombres propios
Gerardo Galeote, Arturo Fasana y Ramón Blanco Balín son las tres personas que describe con detalle Francisco Correa en su confesión, a la que ha tenido acceso eldiario.es, si bien en su testimonio menciona a decenas de personas, y también obvia a otras tantas.
Gerardo Galeote. “Era socio en todas las operaciones de Luis Bárcenas”, afirma Correa, “cobraba comisiones o regalos en los actos que le organizábamos en la Fundación de Estudios Europeos (PP). Le regalé un Mercedes-Benz clase E [valorado en más de 40.000 euros en la actualidad]”. Galeote, que sigue figurando como vocal de FAES en la web de la fundación presidida por José María Aznar, fue diputado en el Parlamento Europeo por el Partido Popular (1994-2009) y presidente de la comisión para el desarrollo regional de la UE (2004-2009).
Arturo Fasana y Ramón Blanco Balín. “Ambos se hacen cargo de la gestión de mi patrimonio y del dinero en el extranjero”, relata Correa. “Blanco Balín fue quien me presenta a Arturo Fasana, persona de su máxima confianza”.
Y prosigue: “Blanco Balín me cuenta su carrera profesional como consejero delegado de Banco Zaragozano, en Repsol, etc, y me explica que ha creado su propio despacho profesional y me cuenta que sus clientes son siempre muy importantes, y me propone que bajo la órbita de Fasana invierta allí mi dinero, porque la importancia de los clientes y de uno en concreto hacía imposible cualquier problema judicial, y que me quedase muy tranquilo”.
“Cuando Fasana venía a Madrid”, afirma Correa, “le cedía mi coche y conductor, para ir a visitar a sus clientes. Mi conductor luego me contaba a qué clientes y a qué lugares acudía con Fasana. En varios viajes que realicé para visitar a Fasana en Ginebra con Ramón Blanco, Arturo [Fasana], con quien ya adquirí cierta confianza, me acreditó visualmente la realidad de lo que me explicó Blanco Balín, y corroboré la coincidencia de las informaciones de mi conductor”.
“Es obvio a día de hoy”, reflexiona Correa, “que la impunidad que me ofrecía Blanco Balín a mí no me alcanzaba, pero sí a otros clientes de la cuenta [corriente] SOLEADO. Blanco Balín me trasladó que todas las comisiones cobradas por él en sus cargos durante ocho años como vicepresidente y consejero delegado de Repsol con los países en los que cerraba acuerdos (Argentina, Colombia, Venezuela, etc), las depositó en la cuenta SOLEADO (Credit Suisse) de su íntimo amigo Fasana, y que ascendían a 60 millones de euros”.
Carmen Rodríguez de Quijano. “Aunque estoy divorciado de Carmen”, dice Correa, “es de justicia que dedique unas breves líneas para manifestar que me resulta muy doloroso e incomprensible que esté en el proceso como acusada cuando su intervención es nula. Aunque aparezca como administradora formal durante un tiempo escaso, hace 18 años, Carmen no tenía conocimiento alguno de mis actuaciones”.