Una reivindicación en ocho pancartas: del elefante republicano al 'Felipe no te flipes'

Participacion ciudadana más imaginación igual a pancartas ingeniosas. Es un cálculo básico de los movimientos sociales que reluce en los momentos más reivindicativos. Imaginación al poder o, dirían algunos, originalidad reivindicativa. Un ejemplo: las concentraciones populares convocadas tras el anuncio de abdicación del rey. Y como muestra, el botón de Sevilla.

Una numerosa manifestación recorrió las calles de Sevilla. Desde plaza Nueva, primer centro de la protesta, la petición de un proceso constituyente y un referéndum sobre monarquía o república pasó a las Setas de la Encarnación, donde hubo una asamblea final que convocó nuevas concentraciones.

El imaginario colectivo 'pintó' elefantes que celebraban la abdicación del rey Juan Carlos, reyes de corazones pegados a coronas de restaurantes de comida rápida y ciudadanos que no se proclaman súbditos.

Muchos de los manifestantes eran jóvenes que marchaban entre proclamas, pancartas, banderas y camisetas republicanas. “Sí se puede”, gritaban.

Durante la concentración se solicitó “votar” la forma de Estado y que el aún príncipe Felipe “se presente a unas elecciones si quiere gobernar”, como peticiones más repetidas.