Meruelo aprueba la construcción de un área de ocio con tres piscinas naturales en el río Campiazo

El Pleno del Ayuntamiento de Meruelo ha aprobado el proyecto para construir un área de piscinas naturales en el río Campiazo, bautizada como 'Campiazo river', una iniciativa que se presentó en 2023 y que ahora toma impulso como “la primera playa de río de Cantabria”. El proyecto está en periodo de información pública y cualquier ciudadano puede consultarlo en la web municipal.

La playa-río tardaría un año en construirse, según la previsión inicial, y se desarrollará sobre tres parcelas de suelo rústico de 40.000 metros cuadrados, ubicadas en el Barrio Solorga, un meandro del río Campiazo. El acceso al recinto se sitúa al norte de la parcela, desde la carretera autonómica CA-454, a su paso por San Miguel de Meruelo. El camino de Santiago, en su itinerario costero, transcurre por esta zona y la ruta quedará integrada y protegida.

Las piscinas, descritas como “ecológicas”, no tendrán contornos redondeados integradas en el paisaje mediante revestimientos de roca decorativa y “playas de acceso con suaves pendientes”. Las tres piscinas previstas -una de ellas de uso infantil- no tomarán agua fluvial, al menos “para el primer llenado” recurrirán al agua del grifo, a la red de abastecimiento, especifica el proyecto desarrollado por la empresa A.C. Proyectos, S.L. y que supondrá una inversión de 1.642.848 euros.

La idea municipal es crear un nuevo espacio de esparcimiento para los vecinos el municipio, una zona en la que se puedaN hacer deportes relacionados con el agua con la idea de impartir cursos de natación, aquagym, aquafitness, aquarunning, natación infantil y con bebés, entre otros. Para acceder a este lugar se construirá un aparcamiento con capacidad para 85 vehículos.

Zonas de picnic

Además de los tres vasos de piscinas se construirán edificios para una cafetería y vestuarios con acabados de madera y elementos tradicionales, de teja y piedra. Al lado, se creará una zona de picnic con mesas y bancos de madera y árboles para dar sombra. El proyecto añade otro espacio no cubierto con asientos de madera que se dedicará a usos educativos, una zona de minibosque y un solarium y zona de pradera para practicar deportes como las palas.

Las piscinas naturales tendrán una forma ligeramente redondeada, con una superficie de 175 metros cuadrados la primera piscina y 160 tanto la segunda y como la tercera, reservada para niños, y estarán rodeadas por pavimento de hormigón y arena. En ellas, como máximo, caben hasta 245 personas. El recinto duplica esta capacidad y proyecta un espacio suficiente para acoger a 495 usuarios.

El proyecto incluye la colocación de nidos artificiales para cigüeñas, un refugio para insectos, un jardín polinizador y un pequeño humedal para anfibios.