Pasaje Seguro recoge 80.000 firmas pidiendo protección a los menores migrantes
“Hemos visto una situación compleja, como no podía ser de otra manera: un tanto por ciento de buen actitud por parte de Servicios Sociales, que se declaran comprometidos con los menores migrantes, con niños que como Samuel, han soportado periplos migratorios dramáticos, y otro tanto por ciento de 'banalidad del mal', esto es, de actuaciones de tipo administrativo que, por un estricto seguimiento de directrices que siempre admiten interpretación, no actúan por el interés superior del menor”.
Son las impresiones manifestadas este viernes desde Pasaje Seguro Cantabria tras la reunión que han mantenido con responsables y técnicos del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS) para conocer y analizar la actuación de la institución cántabra con los menores migrantes no acompañados.
La cita ha surgido debido al conocimiento por parte del grupo ciudadano del caso de un menor camerunés, Samuel (nombre ficticio) que, disponiendo de partida de nacimiento y después un pasaporte válido, fue sometido a pruebas de determinación de la edad, y cuyo caso se archivó por parte del Gobierno de España, pero fue reabierto debido a una consulta que ha supuesto, de facto, que se encuentre “amenazado de expulsión”.
Según ha informado Pasaje Seguro, el técnico Javier Dávila ha afirmado que “no reactivaron la expulsión”, sino que “cesaron la guarda”, debido a “discrepancias” entre el pasaporte y el decreto de edad de Fiscalía, basado en las discutidas pruebas que con todo recoge el 'Protocolo marco sobre determinadas actuaciones en relación con los menores extranjeros no acompañados'. Han reconocido que “el menor no dispuso de intérprete ni representación legal, aunque iba acompañado de técnicos de integración del ICASS que le informaron de las pruebas”, extremo que el menor niega.
Para Pasaje Seguro, “es preocupante que los Servicios Sociales que debían proteger al menor hayan reactivado, con su conducta administrativa, la expulsión del chico que estaba acogido justo cuando debía hacerse efectiva la tutela” ya que “podían haber esperado a que Fiscalía, cuya intervención validando las pruebas y no el pasaporte parecían temer, se pronunciara, cosa poco probable, y no adelantarse provocando esta situación”.
Los representantes del ICASS han insistido en descargar la responsabilidad en el procedimiento que niegan de su parte sobre Fiscalía, aunque parece que el fiscal ha respondido a sus requerimientos.
“A fin de cuentas”, señala el grupo ciudadano, “no han hecho más que reconocer lo que ya sabíamos, incluso nos han confirmado que no tuvo intérprete, aunque dicen que sí fue informado de las pruebas, cuestión que Samuel niega”, afirman. Por eso insisten en que “si es cierto el compromiso con el interés superior del menor, esperamos que en adelante acojan a los menores, los documenten y tutelen, que es la parte más importante”.
La cuestión de la tutela es “de gran relevancia”, pues “es lo que asegura que el menor no quede condenado a la marginalidad por no ponerse en marcha su regularización”. La directora del ICASS, Felisa Lois, ha indicado que se hizo una oferta en el caso de Samuel, que la abogada del menor, Eugenia Gómez de Diego, ha confirmado que consistía en acoger al menor, pero sin tutelarle.
“La cuestión importante es que el menor no quede condenado a ser un sin papeles, y en este caso así ha sido”, insisten desde Pasaje Seguro, quienes destacan, además, que haya sido Cáritas, y no el Gobierno de Cantabria, quien se encargó de que el menor dispusiera de pasaporte (a su llegada sólo tenía la partida de nacimiento).
78.500 firmas
“El caso de Samuel ahora está en sede judicial y depende de las actuaciones de Fiscalía y de los jueces, pero esperamos que no vuelva a ocurrir algo así, nosotras y las 78.500 personas que ya han firmado la petición en change.org”, subrayan, destacando que seguirán vigilantes para que los MENA reciban en Cantabria la atención que merecen.
Lois ha informado a Pasaje Seguro de que desde 2012 han sido acogidos 168 MENA, 35 en 2016. Sin embargo, para este grupo, “el dato relevante no es cuántos menores son acogidos si no cuántos, de hecho, son tutelados. Nos gustaría disponer de esta información”.
La directora del ICASS ha insistido también en la preocupación del Gobierno de Cantabria, a través de la dirección de Política Social, por no sólo acoger a los menores migrantes que sea necesario, sino implementar “modelos de colaboración combinados y dinámicos” entre instituciones y sociedad que faciliten la cobertura de los chicos en la mayoría de edad.
Pasaje Seguro valora “positivamente” que “la Administración cántabra se implique en esta problemática y asegure que los menores tutelados no queden condenados a la marginalidad a su mayoría de edad, sino que sean documentados e integrados en la sociedad”, sin embargo, señalan, “antes de eso han de ser tutelados”.
