Nueva ayuda agroambiental para el viñedo de secano de la región, 26 millones de euros para 50.000 hectáreas

Castilla-La Mancha va a poner en marcha una nueva medida agroambiental para ayudar al viñedo de secano de la región dentro del Programa de Desarrollo Rural en el periodo 2023-27.

El consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, lo ha anunciado en el curso de la rueda de prensa que ha ofrecido junto al embajador de Países Bajos en España, Jan Versteeg, para presentar un proyecto de colaboración, en el que también participa la Universidad de Wageningen, en la que se estudiará la gestión del agua y el suelo en los cultivos leñosos tradicionales.

Según ha señalado el consejero, esta nueva medida agroambiental para el viñedo tiene como objetivo llegar a 50.000 hectáreas de viñedo en la región, y se van a poner a disposición de los viticultores de la región un total de 26 millones de euros de 2023 al 2027,  “para que nuestro viñedo agroambiental de secano siga siendo sostenible y a la vez rentable para nuestros viticultores”, ha señalado.

El proyecto que han presentado hoy el responsable de la Consejería de Agricultura y el embajador de los Países Bajos tiene como objetivo sentar las bases para la construcción de una iniciativa regional que permita la mejora de la gestión del agua y del suelo en cultivos leñosos tradicionales, en concreto, los más importantes de la región: olivar, viñedo, almendro y pistacho.

Este proyecto se pondrá en marcha de dos fases, la primera de ellas se desarrollará a lo largo de este año y en ella se intentará dar respuesta a la problemática que sufren los agricultores en relación a la gestión del agua y el suelo en los cultivos leñosos.

En la segunda fase, que será eminentemente práctica, se abordará la implementación de una estrategia regional en la que se evaluará las distintas buenas prácticas identificadas en condiciones reales.

Para este proyecto se trabajará con agricultores y con proyectos reales. De momento, según Martínez Arroyo ya se está empezando a trabajar con agricultores del Campo de Montiel y de los Montes de Toledo.

El consejero ha destacado que “este estudio nos va a servir para que lo agricultores tomen decisiones en la Política Agraria Común en los nuevo eco-regímenes”, así “el estudio nos va a aportar la ciencia y los agricultores van a poder tomar decisiones de lo que es más rentable para ellos y orientar sus producciones según estos estudios”, ha señalado.

El consejero ha recalcado que la agricultura de la región “es muy competitiva” y en estos “eco-regímenes tenemos que orientar nuestras producciones al mantenimiento de cubiertas vegetales” y ha recordado que en la PAC “hay eco-regímenes orientados al mantenimiento de cubiertas, uno de cubiertas vivas y otra de cubiertas inertes. Estas dos acciones tienen efecto muy positivo para la biodiversidad y la lucha contra la erosión en nuestros suelos y para que mantengan el agua en el subsuelo”, ha señalado.

Según los datos que ha dado Martínez Arroyo, Castilla-La Mancha “cada vez más una potencia en este ámbito” ya que en los últimos años se ha dado un cambio de los cultivos herbáceos a los leñosos. Actualmente hay 1.200.000 hectáreas de cultivos leñosos en la región, el 23% de los leñoso de todo el país, es decir, una de cada cuatro hectáreas de leñoso está en Castilla-La Mancha, ha señalado. De este leñoso, una parte importante es de secano, cultivos que no tienen acceso al agua.