Boticaria García, premiada en el 8M: “La desigualdad es un virus tan peligroso como el coronavirus”
Un acto institucional sencillo y con aforo limitado ha servido hoy para premiar a seis mujeres “imprescindibles” de Castilla-La Mancha con motivo del 8M, Día Internacional de las Mujeres. La farmacéutica y nutricionista Marián García (Boticaria García), la pintora Gloria Merino, la periodista Amparo Álvarez, la investigadora y científica Verónica Miguel, la agente de la Guardia Civil Manuela Simón y la médica Cristina Romero han recogido sus galardones y en nombre de todas ellas, Boticaria García ha llamado a la lucha por la igualdad sobre todo en el ámbito de las mujeres rurales, para su reconocimiento y visibilidad. De igual forma, ha destacado que la desigualdad es “un virus tan peligroso como el coronavirus” contra el que también debe invertirse esfuerzo y dedicación.
En este evento, acompañada de todas las premiadas, de la consejera de Igualdad, Blanca Fernández, y del presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, Boticaria García ha considerado un honor esta distinción para todas ellas y ha dado las gracias al Ejecutivo regional por “reconocer año tras año a las que jugamos en casa”. “Entre el cóctel de emociones aflora el agradecimiento, el orgullo y la responsabilidad por representar a tantas mujeres castellanomanchegas que trabajan dentro y fuera de sus hogares”, ha recalcado, mencionando de manera especial a su municipio de origen, Belmonte (Cuenca).
Dicho esto y tras solicitar que desde las instituciones se premie a las “dulcineas” además de a los “quijotes”, se ha referido a cuestiones que todavía siguen sin soluciones como la brecha salarial entre hombres y mujeres. “A quienes se preguntan por qué seguir reivindicando el papel de la mujer, les podemos decir que hemos mejorado pero seguimos teniendo oportunidades laborales y sueldos sin igualar. Es cierto que corresponde a las autoridades la implementación de medidas, pero la lucha empieza dentro de cada una de nosotras”.
Así, ha confesado que si pudiera escribirle una carta a los “reyes magos de la igualdad”, lo primero que pediría es inversión en la educación de niños y niñas; y en segundo lugar, “arropar” a la mujer rural, “la más vulnerable”. “Necesitamos dotar a esas mujeres de recursos para que saquen sus pueblos adelante, porque hay muchas que siguen sufriendo y de ellas no se acuerda nadie”. A todo ello ha añadido que es preciso mostrar que las mujeres “tenemos las mismas capacidades para todas la disciplinas” y para ello “debemos tener referentes cercanos, porque sin ciencia no hay futuro, y sin talento femenino tampoco”.
Por último, Marián García se ha mostrado convencida de que la desigualdad es “un virus tan peligroso como el coronavirus”, con el que comparte muchas características. La primera de ellas es que también hay “asintomáticos, los silenciosos que son gran parte del problema”, al igual que “grupos de riesgo” y circunstancias que “pueden causar la muerte”. Y como con la COVID, para acabar con la desigualdad, ha dicho, también es necesario “que todos seamos responsables, solidarios y que cumplamos con principios éticos”. “En desigualdad no vamos a estar todos vacunados ni antes ni después del verano, pero la vacunación puede empezar hoy mismo porque depende de todos nosotros. Vacunémonos todos para que vivamos en el mundo con mujeres más libres y que haya más periodistas, más científicas, más guardias civiles… Vacunémonos todos y con urgencia porque aun quedan muchos borregos fuera del efecto rebaño”.
Por su parte, la consejera de Igualdad, Blanca Fernández, ha dicho estar “especialmente emocionada” con las seis mujeres “imprescindibles” premiadas hoy, “que nos demuestran que podemos hacer lo mismo que los hombres si nos lo proponemos, aunque después de muchos años con muchas dificultades y muchos estereotipos”. Pese a ser un 8M atípico, ha augurado que mujeres y hombres volverán a llenar las calles en el futuro con sus reivindicaciones por la igualdad. “Pero hoy hay que recordar a otras mujeres imprescindibles, muchas veces anónimas, por su labor y su compromiso salvando vidas”. Con ello se ha referido a la profesión sanitaria, mayoritariamente compuesta por mujeres, pero también a las que cuidan de las personas más vulnerables en residencias o en sus casas. Esto demuestra que esa máxima de que “si las mujeres paran, se para el mundo”, ahora significa “mucho más”.
También ha tenido palabras de elogio para las cajeras de los supermercados y de los servicios de limpieza, para las víctimas de la violencia de género y también para todas aquellas que tejían mascarillas “cuando era imposible conseguirlas”. “Esa es la otra cara de la moneda del mundo. Todas han dado y dan un ejemplo a seguir. Las mujeres han sido imprescindibles en la lucha contra la peor pandemia en España en los últimos cien años”.
Como conclusión, la consejera de Igualdad ha augurado que posiblemente las consecuencias de la pandemia también van a ser más duras para las mujeres, algo que desde los gobiernos habrá que tener en cuenta cuando se supere la crisis sanitaria, abordando medidas económicas “con perspectiva de género, con las gafas violeta”. Y ha añadido que la igualdad “no es una realidad plena hoy” por la permanencia de los estereotipos de género y que “nos queda por compartir el mundo en igualdad tanto dentro como fuera de casa”. Dirigiéndose a las premiadas, ha destacado su trabajo como “espejos, modelos donde se puedan mirar nuestras niñas y adolescentes” y con la reflexión de que “la lucha por la igualdad tiene que mantenerse viva porque no está exenta de riesgos”.
Las premiadas en el acto institucional han sido:
Gloria Merino, reconocimiento a toda una trayectoria
La primera de las reconocidas es la pintora Gloria Merino, a quien se le reconoce su trayectoria. Residente desde muy pequeña en Malagón (Ciudad Real), se licenció en la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Desde 1965 mostró su visión del mundo rural plasmada en cuadros que exhibió en toda España y en ciudades como Lisboa, París o Nueva York. Tras una gran trayectoria, hoy en día sus cuadros se pueden ver en lugares emblemáticos del arte como el Museo Reina Sofía, la Academia de Bellas Artes de San Fernando o la Biblioteca Nacional. Por todo ello, el Gobierno regional le rinde “este merecido reconocimiento a una mujer que ha destacado en este ámbito y que necesita también que le reconozcamos en este momento de su vida que nos seguimos acordando de ella y que sigue siendo un referente”, ha aseverado la consejera.
Amparo Álvarez, de Albacete
Esta periodista es todo un referente por su compromiso y su lucha en favor de la igualdad. Corresponsal de Radio Televisión Española (RTVE) en Albacete, Amparo Álvarez, es una profesional consolidada, gran comunicadora, seria, sólida e independiente. A lo largo de su trayectoria ha demostrado un incuestionable apoyo a la igualdad a través de informaciones en las que prioriza la igualdad de género, la lucha contra la violencia machista, la educación en las aulas o la mutilación genital femenina. “Su labor y su trayectoria merecen este sencillo reconocimiento”, ha dicho Blanca Fernández al respecto.
Manuela Simón, de la provincia de Ciudad Real
Natural de Torrenueva (Ciudad Real), Manuela Simón formó parte de la primera promoción de mujeres en la Guardia Civil y lo hizo, además, en un puesto nada fácil, porque con sólo 19 años estaba en la primera línea de la lucha contra ETA en la Euskadi de finales de los 80. De hecho, fue una pieza importante en la desarticulación del comando Araba. Ahora participa en ‘El desafío: ETA’ una de las series estrenadas en 2020 sobre la banda terrorista, basada en el libro ‘Historia de un desafío’ del que es coautora. En la actualidad, sigue desempeñando un papel brillante dentro de la Guardia Civil. Por todo ello, la titular de Igualdad y portavoz ha mostrado “el orgullo porque una castellano-manchega fuera una pieza tan importante en la lucha contra ETA en los momentos más duros”.
Marián García, de Cuenca
Marián García, más conocida como ‘Boticaria García’, es doctora en Farmacia y graduada en Nutrición Humana y Dietética y en Óptica y Optometría. Su gran curiosidad y el afán de compartir sus conocimientos le llevaron a cambiar la farmacia rural por la divulgación científica y sanitaria, a la que se dedica desde hace más de 12 años. Esta tarea la compagina con la docencia en el Grado en Nutrición y en el Máster en Divulgación de la Ciencia de la Universidad Isabel I y con colaboraciones en radio, prensa y televisión. Además, colaboró desinteresadamente con el Gobierno de Castilla-La Mancha en su última campaña contra la violencia de género, por lo que la consejera le ha mostrado el agradecimiento del Gobierno y ha expresado “su reconocimiento a su labor y su trayectoria”.
Verónica Miguel, de la provincia de Guadalajara
Doctora en Biotecnología y con un máster en Biomedicina, Verónica Miguel es todo un referente en el mundo de la investigación. A pesar de su juventud, ha investigado en instituciones tan prestigiosas como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) o las universidades de Pennsylvania, Yale y Alabama. En la actualidad, trabaja en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa. De ella, la consejera ha destacado que “pone su talento al servicio de los demás para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, utilizando la ciencia como instrumento de progreso”.
Cristina Romero, de Toledo
Licenciada en Medicina y Cirugía y doctorada en Lectura con Inteligencia Artificial por la Universidad de Granada, Cristina Romero es la jefa de la Sección de Radiología de la Unidad de Mama del Hospital Virgen de La Salud de Toledo y no sólo es conocida por su enorme profesionalidad sino por su gran empatía, su profunda humanidad y su calidad humana, algo vital cuando se atiende a pacientes en situaciones tan complicadas emocionalmente como un cáncer. “En este sentido, esta doctora hace una labor imprescindible”, con palabras de Fernández.
García-Page añade a su madre, fallecida recientemente, entre las premiadas
Para finalizar el acto, el presidente de Castilla-la Mancha, Emiliano García-Page, ha mostrado su agradecimiento a todas las mujeres. “Tenemos que celebrar un día pero es una labor constante que lleva a una relativa frustración porque son metas volantes. Por eso la lucha por la igualdad es una aspiración humana. Gente que fabrica desigualdad la ha habido, la hay y la habrá, por eso debemos llevar a cabo una una pelea sana y democrática contra ellos”.
Además, ha querido añadir a su madre, recientemente fallecida, a las seis mujeres reconocidas en el acto del 8M. De ella ha elogiado que viniendo de una cultura tan antigua, nunca cuestionara y tuviera la “determinación absoluta” de que su hija tuviera una vida distinta. Lo ha puesto como ejemplo de esta lucha constante contra la desigualdad.
“La igualdad no es un gasto, va a terminar siendo una inversión, como la salud. Es una fuente de crecimiento sostenible”, ha recalcado, añadiendo después que esta lucha “ha hecho mucho por el concepto de igualdad global”. “Ha abierto paso a otras batallas por igualdades concretas porque ya es indiscutible, salvo en minorías muy aborregadas, que es un objetivo sostenido en el tiempo. La igualdad entre hombres y mujeres es la madre de todas las batallas, es la que abre camino a otras muchas, la más inevitable y necesaria de mantener en el tiempo”.
0