Se reactiva el caso de Ana Belén Pintado, la 'bebé robada' de Campo de Criptana: “Que se haga justicia”

Corría el año 2017 cuando Ana Belén Pintado Lucas-Torres comenzó a sospechar que era una “bebé robada”. Tenía entonces 44 años y vivía en Campo de Criptana (Ciudad Real). Sus padres habían fallecido. La casualidad al tener que consultar unos documentos para vender un inmueble y sus pesquisas le permitieron descubrir no solo que era adoptada, sino que había sido sustraída a su familia biológica. “La que yo creía que era mi madre era estéril”.

Sus padres adoptivos nunca le dijeron nada. Comenzó entonces la búsqueda de su familia biológica y tan solo un año después, en 2018, conoció a su madre biológica, Pilar, natural de Lanzahíta, un pueblo de Ávila. La había tenido con 24 años, pero le dijeron que su hija había muerto a las pocas horas de nacer. También se reencontró con su padre José Luis, que falleció en agosto de 2024, y con sus dos hermanos y sus sobrinos.

Siete años después sigue luchando para que se reconozca judicialmente lo que ocurrió. “Llegaremos hasta donde podamos, estamos en nuestro derecho”, reivindica.

En el camino se han interpuesto varias denuncias. En enero de 2019 se presentó una querella criminal contra José María Castillo, el médico que presuntamente estuvo detrás de la adopción de la 'bebé robada'. Ya falleció, así que en su caso el camino en los tribunales quedó cerrado. “Esto no se tiene que quedar aquí, quiero llegar hasta el final y que se haga justicia porque hay muchos casos como el mío”, relataba entonces Ana Belén en una entrevista con elDiario.es Castilla-La Mancha.

En 2022 interpuso otra querella contra el director del Centro de Maternidad Santa Cristina de Madrid, en el momento de los hechos, alegando presuntos delitos de detención y sustracción ilegal y forzosa, falsedad documental y también de alteración de paternidad y maternidad, en el marco de crímenes de lesa humanidad.

“La querella ha sido archivada hasta en dos ocasiones, pero la Audiencia Provincial de Madrid ha dicho que hay que seguir investigando”, explica Ana Belén. El caso se reabrió en marzo pero el procedimiento quedó en suspenso por la falta de un expediente.

Este jueves, tres declaraciones ante el juzgado de instrucción

El caso sigue en proceso de instrucción, pero ahora se muestra de nuevo ilusionada ante la posibilidad judicial de avanzar. Este jueves 11 de diciembre la madre biológica de Ana Belén ha sido citada a declarar en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 10 de Madrid, en calidad de testigo. Una citación que también han recibido una administrativa y dos matronas de la maternidad Santa Cristina contra la que se querelló.

Una de las matronas declarará como investigada, ya que en su momento dirigió el centro, según ha explicado la abogada de Ana Belén Pintado, en declaraciones a este medio. Itziar Bilbatua sigue pendiente de que se practiquen varias diligencias, como por ejemplo la que permitirá disponer del expediente de adopción, clave para el caso. Fuera del proceso de declaraciones ha quedado otra persona -que también fue director de la maternidad- y que alegó “falta de capacidad para declarar y entender las repercusiones del procedimiento”, detalla la abogada.

Ana Belén Pintado mantiene la esperanza de que “se haga justicia”. “Es lo que busco y que quien haya hecho mal, que lo pague. Por tantísima gente como yo, y que no encuentra a su familia. Me tienen como referente, me preguntan cómo lo he hecho y eso me motiva a seguir adelante”.

“Somos personas normales, a veces no tenemos ni recursos para seguir y es a nosotros a los que nos tratan de 'malos'. Hay gente poderosa, con nombre y apellidos. Creo que ya es hora, tiene que conocerse”, argumenta.

Somos personas normales, a veces no tenemos ni recursos para seguir y es a nosotros a los que nos tratan de 'malos'. Hay gente poderosa, con nombre y apellidos. Creo que ya es hora, tiene que conocerse

El pasado octubre Ana Belén y su madre Pilar estuvieron entre las personas homenajeadas en un acto celebrado en el Auditorio Nacional de Madrid con motivo del Día de Recuerdo Víctimas de la Dictadura. El evento buscaba reconocer a diversas víctimas del franquismo, con una mención especial a los casos de bebés robados. “Fue muy emotivo”, recuerda.

Ese día, según cuenta, tuvo ocasión de conversar con el presidente del Gobierno Pedro Sánchez durante unos instantes. “Le dije que estábamos muy agradecidas, muy contentas pero... que faltan cosas por hacer”. Le pidió “abrir los archivos, tanto los de la iglesia como los de las clínicas, o poner en marcha un banco de ADN”.