Soriano acusa a la Generalitat de conducir a Spanair al concurso de acreedores con el recorte de financiación
El expresidente de Spanair Ferran Soriano ha defendido en juicio que la compañía aérea tuvo que someterse al concurso de acreedores cuando la Generalitat les retiró la financiación. Asimismo, ha negado la acusación de la Fiscalía de que retrasaron su presentación agravando el estado de insolvencia de la empresa.
“Se nos dice que no van a financiarnos más, y como nos dicen eso, convocamos el concurso. No se hizo antes porque había financiación”, ha explicado el ahora director ejecutivo del club de fútbol Manchester City, en el primer día de juicio celebrado este martes en el auditorio de la Ciudad de la Justicia de Barcelona dos años y medio después de la quiebra.
Según ha explicado Soriano, la compañía estaba trabajando para el Aeropuerto de Barcelona en un 'hub' que “aumentaría el PIB de la ciudad en un 3%” y cuyo proyecto la Generalitat se había comprometido a financiar a través de la empresa pública Avança.
Ha recordado que Spanair negoció “en exclusividad” con Qatar Airways hasta finales de diciembre de 2011, pero esta compañía abandonó la puja ante su temor de que la UE considerase las aportaciones públicas de la Generalitat como ayudas de Estado.
Negociación con Qatar
Soriano ha contado que la Generalitat había prometido financiar la compañía aérea hasta que encontrara un inversor. Primero negociaron con Qatar Airways y, tras su rechazo, con la aerolínea china HNA. Esta pidió en ese momento un mes más para pensárselo, y Avança pidió compromisos y dinero, según Soriano, pero HNA no quiso. Fue entonces cuando la Generalitat retiró la financiación a Spanair y, según Soriano, la empujó a la quiebra.
La Fiscalía considera a los miembros del consejo de la aerolínea culpables del concurso de acreedores porque retrasaron la solicitud agravando el estado de insolvencia de la empresa, coincidiendo en su valoración con los administradores concursales: estaban en insolvencia manifiesta el 30 de junio pero el concurso se retrasó cinco meses, agravando el déficit concursal en 72,1 millones de euros.