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Compromís pide a Sanitat que haga test a los asistentes a los actos taurinos de Vila-real sin medidas de seguridad de la ganadería sancionada por el Consell

Un momento del espectáculo taurino celebrado el pasado 3 de octubre en Vila-real con vacas y toro embolado de la ganadería El Mijares.

Lucas Marco

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La ganadería El Mijares, sancionada por el Consell con multas de hasta 90.000 euros y cuatro años de prohibición de actividad por varias infracciones, ha aportado sus vacas y sus toros a varios de los polémicos espectáculos organizados los fines de semana de este mes de octubre en una plaza portátil de Vila-real. El grupo municipal de Compromís ha denunciado la falta de medidas de seguridad detectadas en los actos taurinos, que incluyeron también el bou embolat, y que “han puesto a Vila-real en el mapa de la vergüenza a nivel nacional”, según denuncia la portavoz, Maria Fajardo. La formación valencianista asegura que “en prácticamente todas las citas taurinas” celebradas este mes, los asistentes “no guardaban la distancia mínima de seguridad”.

La portavoz de Compromís en Vila-real considera que la Conselleria de Sanidad debería plantearse realizar tests a quienes hayan asistido para detectar si ha habido algún foco de contagio. A los eventos taurinos, según Fajardo, han asistido personas de otras comarcas, además de los aficionados de Vila-real. “Por el momento, estamos a la espera de los informes solicitados y después decidiremos cómo proceder, si lo estimamos conveniente”, añade.

El alcalde socialista de la localidad castellonense, José Benlloch, diseñó los festejos taurinos con una plaza portátil para obtener los permisos de la Generalitat Valenciana para tan singular celebración en una época de pandemia mundial (cuando se anunció, a mediados de septiembre, el Ayuntamiento de València cerraba las zonas de juego infantiles en los parques públicos).

Fajardo ha recordado que “el Consell ha llegado a recortar a la mitad el aforo máximo permitido, de 800 a 400 personas y el equipo de gobierno, en lugar de aceptarlo, ha criticado que la empresa organizadora perdería dinero. Ese no es el problema de los 52.000 vila-realenses”, señala. “Una vez más, se ha insistido en la generación de economía, pero justamente las ganaderías no siempre han sido de la zona”, apostilla Fajardo.

“Lo peor es que incluso asistentes a los eventos nos han llegado a comentar que no se sentían cómodos al ver que muchas personas llevaban mal puesta la mascarilla e, incluso, estaban bebiendo alcohol, motivo que nos ha llevado a solicitar los informes realizados por la Policía Local donde quede constancia de las actuaciones policiales”, explica. En las Cortes Valencianas, la síndica adjunta de Compromís Mònica Àlvaro ha registrado una batería de preguntas parlamentarias sobre las autorizaciones sanitarias del acto, el protocolo establecido y los informes que la policía autonómica.

Compromís ha solicitado al equipo de gobierno los costes de la jornada taurina organizada el 9 de octubre, a cargo de las arcas municipales en pleno festivo autonómico en el que “nunca se hace ni siquiera un mísero acto conmemorativo de tan señalada fecha”, critica Fajardo.       

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