Consuelo Císcar dice que en su época en el IVAM “casi había más transparencia que ahora”
- La exdirectora del museo, imputada por malversación, asegura que el centro era auditado cada año por una entidad externa con el visto bueno de la Generalitat
La exdirectora del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM), Consuelo Císcar, ha destacado este lunes que este museo “cada año era auditado” mediante “una auditoría externa, propiciada por la Conselleria de Hacienda” y a través de “la Dirección General de la Generalitat”, por lo que ha asegurado que “por lo tanto, la transparencia estaba clara”.
Císcar, investigada por presuntos delitos de malversación de caudales públicos, prevaricación y falsedad documental por irregularidades en la gestión del IVAM, se ha pronunciado de este modo en el pleno ordinario celebrado esta jornada en el CVC durante el debate de un informe de este órgano consultivo sobre el anteproyecto de ley de este espacio cultural.
Asimismo, la consejera del CVC ha apuntado que “casi la transparencia era más antes que ahora”. En este sentido, se ha referido al informe debatido con anterioridad en la sesión plenaria sobre el presente y el futuro de las bibliotecas públicas y ha dicho que “igual que en las bibliotecas, en unas cosas se ha avanzado y en otras se ha retrocedido”. “Hay cosas en las que se ha retrocedido”, ha insistido.
Durante su intervención en el pleno del CVC tras la exposición del informe sobre el anteproyecto de ley del IVAM, Consuelo Císcar ha hecho alusión a uno de los puntos que ha centrado el debate, la consideración sobre el cargo de director general y sobre debe ser cargo político o no.
“Alta dirección”
Císcar ha señalado que a lo largo de su existencia el Institut Valencià d'Art Modern ha tenido directores generales que no eran cargo político y para los que se suscribía “un contrato de alta dirección”, según ha dicho, “un contrato laboral de alta dirección” que no implicaba ser “cargo público”.
Así, ha apuntado que se trataba de “un contrato indefinido” y que este se podía cesas “como le sucede a cualquier otro trabajador” y ha agregado sobre la “transparencia” que “todos los que hemos sido directores del IVAM presentábamos nuestro patrimonio en las Corts sin ser alto cargo”.
El informe sobre el antreproyecto de la ley del Institut Valencià d'Art Modern, presentado en el pleno por la consejera Ana Noguera, se ha emitido a petición del conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, a quien se remitirá, ha sido aprobado por unanimidad en el pleno del CVC. La nueva norma del museo pretende, como recuerda el órgano consultivo, ser “más acorde con el momento actual” y disipar “dudas o interpretaciones ambiguas que pudieran derivarse de la actualmente vigente”.
“Máximo órgano asesor”
El documento elaborado por el CVC lamenta “la injustificada exclusión” en los consejos del IVAM de los vocales nombrados a propuesta de este órgano consultivo, como recoge el anteproyecto de ley. Los miembros del Consell Valencià de Cultura critican que esto se establezca a pesar de que se trata “del máximo órgano asesor en materia cultural de la Generalitat valenciana y de las instituciones públicas valencianas”.
Noguera ha resaltado en la exposición del informe lo “rápidos” que han sido los miembros del CVC para emitirlo, dado que la solicitud de Marzà se produjo en febrero, sin “establecer plazo para su realización”, y a finales de marzo ya se cuenta con el documento solicitado tras “haber pasado por todas las comisiones”.
El informe del Consell València de Cultura, insta en su observaciones genéricas a corregir del contenido del anteproyecto de cuestiones como “un error cronológico” al hablar de la Ley de Creación del IVAM de 1986 y a precisar expresiones como “tras unos meses de vigencia”. Asimismo, en la exposición de motivos emplaza a corregir también la mención que hace al artículo 50 de la Ley 6/1993 sobre CulturArts dado que “poco o nada tiene que ver con el propio IVAM” ya que, según Noguera, “son dos instituciones separadas”.
El CVC estima también que debería “suprimirse o matizarse adecuadamente” la aseveración que se hace en el anteproyecto respecto al objeto, los fines y funciones del IVAM en favor de su “independencia” y “visión científica y rigurosa”.
“Dependencia política”
En esta línea, censura la “dependencia política de la Generalitat” que parece establecerse, “alejada de una visión científica y rigurosa de la cultura y, en particular, del arte moderno y contemporáneo”, al decir que este museo “responderá al desarrollo de la política cultural de la Generalitat en materia de arte moderno”.
En cuanto a los Consejos Rector y Asesor del IVAM el informe del CVC considera, como ha planteado Ana Noguera, que a lo recogido en el anteproyecto de ley “se debería dar ciertas vueltas antes de aprobarlo” dado que es “cuanto menos confuso”.
“Es necesario que la ley dé pequeñas vueltas a los dos consejos”, ha dicho la consejera, que ha agregado que se observan “determinadas incoherencias”. A su vez, ha pedido la “paridad” entre “mujeres y hombres” en estos dos órganos del museo o “por unos límites de desequilibrio”.
Entre las propuestas que el CVC plantea para el Consejo Rector está la de dar la oportunidad a la dirección, si cambia, de elegir a los miembros de este organismo. “Conviene tener en cuenta que si la designación se produce a propuesta de la Dirección a la Presidencia del IVAM, parece razonable que dicha oportunidad la tuvieran también nuevos responsables cada vez que se produjeran estos cambios”, apunta el documento. Igualmente, estima “innecesario” establecer “limitación temporal” de pertenencia a dicho consejo.