Los sindicatos aplauden la más que probable reedición del Botànic
El pasado domingo, los valencianos dieron un nuevo voto de confianza a los partidos del Botànic. Entre las tres fuerzas firmantes del acuerdo que la pasada legislatura acabó con la hegemonía del Partido Popular y, por tanto, posibilitó el cambio de Gobierno en la Generalitat suman 52 de los 99 diputados de las Corts -27 PSPV, 17 Compromís y 8 de Unides Podem-. Las tres formaciones han mostrado públicamente su voluntad de reeditar el pacto de gobierno, con una modificación: en esta ocasión la coalición que forman los partidos de Pablo Iglesias y Alberto Garzón (Unides Podem-EUPV) y que lidera Rubén Martínez Dalmau quiere entrar en el Ejecutivo autonómico, circunstancia que parece se producirá.
Los sindicatos valencianos (UGT-PV, CC.OO. e Intersindical) han celebrado los resultados en las urnas, han reconocido que fueron un “alivio” ante la posibilidad de que las tres derechas (PP, Ciudadanos y Vox) sumaran. “Nos llegó a preocupar que pudiera ganar una opción que acabara beneficiando a la clase más favorecida de la sociedad, con una extrema derecha que quiere recortar libertades y que apuesta por la recentralización”, ha dicho el secretario general de UGT-PV, Ismael Sáez.
En esta misma línea se expresaban el portavoz de Intersindical Valenciana, Vicent Maurí, y CCOO-PV, Arturo León, quien cree que existen “motivos para la esperanza” porque la ciudadanía “ha rechazado el populismo demagógico, reaccionario y de crispación”, apostando por gobiernos “de progreso” tanto en Valencia como en Madrid. En opinión de Maurí, la movilización ha sido “clave” para “frenar las políticas involucionistas”.
Sáez sostiene que en los últimos cuatro años la Comunitat Valenciana ha avanzado económicamente, “ayudada por la coyuntura general”, y socialmente, además de acabar con la imagen ligada a la corrupción. “Ahora hay que profundidizar en esta senda”, insiste el líder de UGT-PV, quien considera clave la reforma del modelo de financiación y la aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado que, considera, eran muy positivos para el territorio valenciano.
Precisamente, la importancia de la reforma del sistema de financiación es un elemento en el que coinciden los tres sindicatos ya que resulta esencial para “generar riqueza” y poder “profundizar en el autogobierno”. “Sin los recursos necesarios no podemos afrontar los grandes retos que tiene nuestro territorio”, ha sentenciado León. Maurí, por su parte, exige del nuevo Gobierno valenciano que dé un paso más en sus reivindicaciones y que pase “de los gestos a la acción”.
Al futuro Consell, los sindicatos le exigen que apueste por el empleo público de calidad -al Ejecutivo central le reclaman la derogación de la reforma laboral aprobada por el PP-, mientras que desde Intersindical reclaman al Gobierno autonómico que continúe con la senda de la recuperación de las concesiones sanitarias privatizadas, siguiendo con el ejemplo de la recuperación para la gestión pública del Hospital de Alzira.