Puente considera “inocuo” tirar al mar 25,6 millones de metros cúbicos de arena y cemento para ampliar el Puerto de València
“Lo que vamos a hacer es rellenar con un muelle un dique que ya existe. Es prácticamente inocuo para la Albufera y para las playas, el daño ya está hecho y ahí es donde hay que intervenir y donde se ha empezado a intervenir con una inversión de 30 millones de euros en la regeneración de las playas del Saler con un resultado evidente”.
El ministro de Transportes, Óscar Puente, se pronunció así este miércoles en su primera comparecencia ante la Comisión de Transportes y Movilidad Sostenible del Congreso para informar sobre las líneas generales del Ministerio que dirige, interpelado por el diputado de Compromís-Sumar, Alberto Ibáñez, en relación con la ampliación del Puerto de València, y también sobre el mismo tema por el diputado de Vox, Carlos Flores.
Como ya hiciera la semana pasada en el Fórum Europa, donde afirmó que el proyecto es ambientalmente “impecable” pese al destrozo que ha supuesto en las playas del Parque Natural de la Albufera, el ministro defendió a ultranza la aprobación de la construcción del muelle para la creación de una terminal de contenedores de 137 hectáreas de superficie, con la que el Puerto de València duplicará su actual capacidad de carga, cifrada en unos 7 millones de contenedores.
Puente calificó de “inocua” una actuación que supone extraer recursos naturales mediante dragados en el propio Puerto de València, de Sagunto y en un banco de arena ubicado junto a la costa de Cullera para depositar 25,6 millones de metros cúbicos de arena y cemento en las aguas abrigadas ganadas al mar. Una cantidad que además supera en 6,6 millones de metros cúbicos lo estipulado en la declaración de impacto ambiental (DIA) de 2007. Por no hablar del impacto que producirá el trasiego de grandes buques portacontenedores frente a las playas del parque natural.
El ministro, además, insistió en la idea de que fue el muelle sur y no el norte el que ha generado los problemas de regresión en las playas, cuando un reciente estudio de la Universitat de València concluye todo lo contrario, como le recordó el diputado Flores.
Según Puente, “la primera de las terminales ya produjo una incidencia bastante importante en las playas del sur de València” y añadió: “Esta que se proyecta ahora es prácticamente irrelevante. El daño ya lo hicieron las terminales construidas previamente, esta es una cuestión difícil de rebatir”.
Los investigadores del Institut Cavanilles de la Universitat de València (UV), sin embargo, lo rebaten en un artículo publicado en la revista 'Urban Science' en el que concluyen que la mayor regresión de las playas de Pinedo, la Garrofera y El Saler se produjo a partir de la construcción del espìgón norte, y que de 2013 a 2022 se han perdido 90 hectáreas de arena.
Óscar Puente insistió en que la operación, al ampliar la masa crítica del puerto, ayudará a trasladar más mercancías de los barcos a los trenes y no tantas a los camiones. “Podremos liberar más de 1.000 camiones diarios que en este momento están colapsando la V-30”, defendió.
El diputado de Compromís-Sumar, Alberto Ibáñez, no comparte esta opinión del Gobierno del que forma parte. Ibáñez criticó que la ampliación “es insostenible” desde el punto de vista medioambiental e “innecesaria” en el plano económico y de comercio exterior.
“Lo que se está haciendo es vender un trozo de España más grande que Gibraltar a una multinacional extranjera. Señor ministro, no se preocupe, no habrá ampliación del Puerto de Valencia”, dijo Ibáñez, quien advirtió de que los tribunales “pararán el proyecto”.
10