Tapia ve futuro a la ACB, pero duda de la viabilidad de la planta de Zumarraga
El futuro de las dos principales plantas de Arcelor Mittal en Euskadi, la ACB de Sestao y la factoría de Zumarraga (Gipuzkoa), puede correr distinta suerte. Al menos así lo ve la consejera vasca de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, quien confía en que el grupo Arcelor reanude este mismo año la actividad de la planta Acería Compacta de Bizkaia (ACB) de Sestao. En cambio, el panorama para Zumarraga es más complicado, según la consejera.
Durante una comparecencia ante el Parlamento para explicar las gestiones hechas por el Gobierno vasco desde que Arcelor Mittal anunciara el 21 de enero una parada temporal e indefinida de la planta ACB, Tapia ha diferenciado con claridad la situación por la que atraviesa esta planta y la de Zumarraga. En este caso, el proceso de 'cierre' culminará al final de la próxima semana, cuando se prevé que solo quede activo el parque de chatarra (en el que trabajarán ocho empleados), según la multinacional india. El resto de empleados de la planta, 342 personas, serán recolocados en otras fábricas de la multinacional en el País Vasco o en Asturias.
“Esta planta necesita inversiones de calado y una diversificación del producto. No ha recibido la atención necesaria por parte de Arcelor”, se ha lamentado la consejera. Por eso, ha reclamado al grupo quediseñe un plan de viabilidad para la continuidad de su actividad. Sin embargo, las conversaciones con respecto al futuro son más “complicadas” que con ACB, donde en estos momentos es “más fácil” recuperar su viabilidad.
Parada reversible
En relación a la planta de Sestao, la consejera ha incidido en que una vez que se presente el plan de viabilidad que está elaborando la dirección es posible que su situación de parada temporal sea reversible a lo largo de este año tras acometer inversiones en modernización, eficiencia energética y formación. El plan será presentado en “uno o dos meses” y supondría la reapertura de la actividad y la “plena operatividad” de la ACB.
Al margen de las inversiones, sobre las dos fábricas planea la complicada situación que está atravesando el sector del acero de toda Europa debido sobre todo a los bajos precios de las exportaciones chinas, a prácticas comerciales desleales, a la sobreproducción y a los elevados costes eléctricos.
