El Gobierno vasco se abre a participar en empresas a través de fondos extranjeros en su plan de 1.000 millones de inversión
El Gobierno vasco quiere impulsar las empresas vascas canalizando inyecciones de capital a través de diferentes vehículos financieros entre los que se encuentra la creación de un “fondo de fondos” con el que se abre la participación del Ejecutivo en las empresas de manera indirecta, a través de mecanismos de inversión que no se descarta que puedan ser extranjeros. Además, para facilitar y ampliar las inversiones, se modifican condiciones de vehículos financieros ya existentes, como es el caso de Finkatuz, que se abre a la participación directa en el capital de empresas aunque no tenga su sede social en Euskadi, pero que tengan importante “impacto” en la economía vasca, y se flexibilizan criterios del tamaño de las empresas en las que se puede tomar participación en el capital, para a ampliar así el número de posibles inversiones. Estos dos instrumentos canalizarán parte de los 1.000 millones de euros con los que el Gobierno vasco participará en la Alianza Financiera Vasca y con los que se quiere movilizar inversiones de 4.000 millones.
El programa Euskadi Eraldatuz 2030, como se ha denominado al plan de inversiones que distribuirá estos 1.000 millones que pondrá el Ejecutivo, autorizados antes del verano por el Parlamento y en cuya creación ha colaborado la consultora KPMG, ha tenido este miércoles su puesta de largo en la Bolsa de Bilbao en un acto presidido por el lehendakari, Imanol Pradales, los consejeros de Hacienda y Finanzas, Noël d’Anjou, e Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, y la directora del Instituto Vasco de Finanzas, Amaia del Villar. Entre el público, varios consejeros más y representantes institucionales, miembros del ecosistema financiero e inversor vasco, empresarios e integrantes de las nueve entidades que apoyaron el compromiso fundacional de la Alianza Financiera Vasca en el mes de marzo.
“Hoy activamos y alineamos las capacidades financieras de nuestro país para avanzar en la transformación económica de Euskadi, impulsar nuestra competitividad, defender nuestra industria, y seguir garantizando un empleo de calidad”, ha señalado el lehendakari en su intervención, en la que ha destacado que el contexto internacional de incertidumbre hace necesario “arriesgar”. “Hay diagnóstico, hay receta. Pero hay que ir a la farmacia a comprarla y tomar la medicación. Debemos transitar este camino como pueblo, conjugando responsabilidad individual y colectiva, pública y privada, como siempre hemos hecho. Nos estamos jugando el futuro de este país” ha insistido Pradales.
El nuevo plan de inversiones que se vehiculizará a través de Euskadi Eraldatuz 2030 estará directamente al alineado al Plan Industrial- Euskadi 20230, que se aprobó el pasado martes en el Consejo de Gobierno, y seguirá en cierto modo los sectores estratégicos marcados en dicho plan. Además, tendrá en cuenta las directrices del Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación y la estrategia Euskadi Global.
Los 1.000 millones se canalizarán a través de cuatro vehículos: el propio Institututo Vasco de Finanzas, dotado con 150 millones de euros, Finkatuz, que se dotará con 350 millones que se añadirán a los 200 con los que cuenta ahora, el fondo Indartuz, de nueva creación, para inversiones directas e indirectas -a través de fondos o entidades- en proyectos transformadores, que recibirá 400 millones de euros, y dos fondos de capital riesgo -Handituz y Ezten II- que contarán con 100 millones de euros con el objetivo de que las empresas, independientemente de tamaño, dispongan de instrumentos para transformación, accedan a financiación y obtengan apoyo en cada caso. “El planteamiento es que la tracción de inversión privada y la colaboración con otros socios e instituciones permitirán un apalancamiento de más de 3.000 millones adicionales, multiplicando el efecto transformador”, ha destacado la directora del IVF, Amaia del Villar.
Entre las novedades destaca el hecho de que el Gobierno vasco se abra a la participación indirecta en las empresas a través de fondos que pueden ser extranjeros. Es decir, el Gobierno participaría a través de Indartuz en un fondo o entidad, en un porcentaje que no superará el 49%, y este fondo sería el encargado de canalizar la inversión o participación empresarial. Aunque la intención es que las operaciones se hagan con fondos de inversión vascos, o que se creen nuevos en Euskadi, el departamento de Hacienda no descarta que esos fondos puedan ser de capital extranjero. El consejero Nöel D'Anjou se ha mostrado más partidario de que sean fondos europeos -“no estará abierto a todo el mundo”, ha señalado-, se aprovecharán las rondas informativas que se hacen en distintos mercados para publicitar la deuda vasca para intentar captar inversores, y se hará un concurso público para determinar los fondos que participan en cada inversión. A través de Indartuz se canalizará también deuda flexible para las empresas
Por otra parte, el que hasta ahora ha sido el principal vehículo del Gobierno vasco para facilitar el arraigo empresarial, Finkatuz, modificará sus condiciones para cubrir más empresas. De entrada, no será necesario que sea una empresa con sede social en el Euskadi en la que se tome la participación y bastará con que genere “impacto” positivo en la economía vasca. Con ello se facilitará la entrada en nuevas implantaciones empresariales. Por otro lado, se flexibilizan las condiciones y se podrá invertir en empresas con una facturación de 50 millones de euros y más de 30 trabajadores. Hasta ahora la facturación tenía que ser de más de 100 millones y contar con más de 50 empleados. El objetivo será “dar un empujón y acelerar” la transformación y que Euskadi esté en “la punta de lanza” de la reindustrialización, ha dicho el consejero D'Anjou. “Es el momento de actuar con visión y decisión”, ha asegurado.
0