Ultraderechistas 'toman' la sede socialista en la marcha contra el matrimonio igualitario de París
Una veintena de miembros del grupo ultraderechista Generación Identitaria ha ocupado durante unos minutos la sede del Partido Socialista francés (PS) durante la celebración de la marcha contra el matrimonio homosexual que ha tenido lugar esta tarde en París.
El grupo ha accedido mediante escaleras a la azotea del edificio que se encuentra en la calle Solférino, relativamente cerca de la explanada de los Inválidos donde ha concluido la manifestación contra el matrimonio igualitario. Una vez en la azotea han lanzado varios cohetes y desplegado una pancarta exigiendo la dimisión del presidente François Hollande, que promulgó hace ocho días la ley que permitirá contraer matrimonio a los homosexuales franceses.
La policía ha detenido a los integrantes de Generación Identitaria, uno más de los colectivos radicales que había amenazado con provocar incidentes durante la marcha. La Policía francesa había movilizado a más de 4.500 agentes para garantizar la seguridad en la manifestación, la tercera gran protesta contra la norma desde el mes de enero.
Menos participación
Aunque los convocantes hablan de un millón de asistentes, la Policía asegura que los manifestantes no han superado los 150.000. La cifra contrasta con las ofrecidas tras las anteriores marchas por las propias fuerzas de seguridad. Si en la protesta de enero los convocantes lograron reunir a 380.000 personas, según la Gendarmería, la marcha de marzo no alcanzó las 300.000. En esta ocasión, la asistencia se ha quedado en la mitad.
Según una encuesta publicada este domingo, el 78% de los franceses considera que deben superarse ya las protestas contra el matrimonio gay, que ha recibido el respaldo de la Asamblea Nacional y del Tribunal Constitucional del país. Frigide Barjot, convocante de las primeras protestas y líder del movimiento contra el matrimonio gay en el país, ha declarado sentirse amenazada tras ver superada su posición por la ultraderecha. La situación le ha llevado a no participar en la manifestación de este domingo.
Sí han acudido a la marcha representantes de la UMP, el partido del expresidente Sarkozy. Su nuevo líder Jean-François Copé ha criticado las, a su juicio, “inaceptables tentativas de presión y de intimidación” del primer ministro, Jean-Marc Ayrault, que este sábado ha acusado a la UMP de contribuir a la “crispación y a la radicalización” por dar su apoyo a una marcha con una amplia presencia de colectivos radicales.
