Agua alcalina como aliada para hidratar a deportistas

Ya sea practicando deportes al aire libre o en interior se trata de concienciar que frente al sedentarismo solo hay un camino: luchar ejercitándose, aunque sea media hora al día.

Cada vez son más las voces que se alzan para advertir que las jornadas de trabajo, las rutinas y el cansancio no sirven de excusa para buscar ese rato diario en el que poder hacer ejercicio, ya sea moderado o intenso, según cada persona. Pero algo hay que hacer.

Uno de los grandes problemas de salud a los que se enfrenta la sociedad parte de básicos: falta de ejercicio y una alimentación e hidratación que no siempre es la adecuada.

¿Cómo prepararse para comenzar rutinas deportivas saludables?

La fuerza de voluntad es vital para levantarse y lanzarse a practicar algo de deporte de manera asidua.

Quienes parten de una forma física baja bastará con comenzar con caminar media hora, aunque sea alrededor de su oficina o vivienda, pero de forma habitual. Poco a poco, el cuerpo irá activándose y, al sentirse mejor, serán capaces de ir planteándose incrementar el tiempo o, incluso, saltar a una disciplina distinta. 

“No se trata de hacer grandes esfuerzos que desmotiven al principio. Se trata de comenzar poco a poco, habituarse a respetar un tiempo al día para cuidar de la salud tan solo moviéndose. Caminar, subir escaleras o buscar entrenamientos que puedan realizarse en casa puede ser suficiente para arrancar con la práctica”, explican médicos de cabecera preocupados de ver en consulta cómo dolencias como el colesterol, la diabetes o el sobrepeso podrían mejorar con introducir ciertos hábitos.

Pero no solo es moverse, también para hacerlo es necesario comer y beber mejor.

La alimentación y la bebida: claves para rendir más deportivamente

No solo se trata de rendir más sino de sentirse mejor. Y esa debe ser la inversión en tiempo y selección.

Pese a lo que pueda parecer, seguir una dieta con fruta y verdura fresca no solo beneficia al organismo sino que mejora también el bolsillo. Comprar en el mercado fruta fresca de temporada no es más caro que comprar platos precocinados. Y la diferencia es abismal para la salud.

Según estudios amparados por universidades de gran prestigio, la inclusión diaria de este tipo de alimentación mejora considerablemente no solo la salud sino el ánimo también, gracias a la aportación directa de minerales, vitaminas y antioxidantes.

Y aquí llegamos a uno de los puntos clave también para quienes, de forma habitual, ejercitan el cuerpo con cualquier actividad física: combatir el alto estrés oxidativo que presentan los deportistas.

¿Cómo influye el agua en el rendimiento?

La lógica lleva al primer estadio: para hacer deporte es necesario también hidratarse.

Beber agua es vital para poder rendir deportivamente. El deporte ayuda a liberar toxinas a través del sudor, pero el cuerpo necesita recuperar la hidratación y este proceso solo tiene un camino: beber agua.

Pero no todas las aguas son iguales. Recientes estudios avalados por empresas como la española Alkanatur han demostrado los beneficios del agua alcalina ionizada en deportistas. 

Tal como se ha podido saber a través de un estudio realizado por el equipo médico del Reebok Sport Club de la Finca por el cardiólogo Cristian Casseus y la doctora María Jesús Núñez, “la ingesta de agua alcalina ionizada de las Jarras de Alkanatur demostró un incremento significativo del tiempo para alcanzar el umbral anaeróbico, es decir, retrasó la fatiga. Además, el análisis de lactato sanguíneo, reflejó también una mayor recuperación muscular después del ejercicio, clave en deportistas con altas cargas de entrenamiento”.

¿Qué diferencia tiene entonces el agua embotellada, por ejemplo, frente a la opción de filtrado para conseguir el agua alcalina?

En realidad, mucha. El agua, para ser alcalina, necesita situarse en el umbral algo por encima del PH 7, el considerado neutro. Incrementar por encima del neutro su PH hace que se ponga en la línea de la alcalinidad, lo que confiere al agua más oxígeno.

Pero además, si esto se hace a través de filtros como los que propone Alkanatur en sus jarras, también es capaz de evitar los peligros de los disruptores endocrinos, huyendo del Bisfenol A en la fabricación de sus productos y apostando por certificar que sus filtros producen agua libre de bacterias, de BPA, Esbo y ftalatos, entre otros. 

“No hace falta buscar la referencia en un estudio internacional. Ya mostramos hace unos meses junto con el doctor Nicolás Olea de la Universidad de Granada las consecuencias de los productos con disruptores endocrinos( tóxicos que emiten los plásticos). El problema, en muchos casos, es la sobre exposición a la que la población está sometida sin apenas saberlo a este tipo de productos químicos que pueden alterar el equilibrio hormonal. Y mucho más cuando se trata de algo tan común como las botellas, elementos de nuestro día a día que poca gente puede eliminar de sus rutinas si no es consciente de su peligro”, explican desde la marca gallega.

Es por ello que, incluso en el caso de deportistas, prestar atención a este tipo de noticias les hace plantearse la necesidad de consumir agua de calidad que, de verdad, mejore no solo la recuperación sino el rendimiento.

Otros beneficios para todos del agua alcalina ionizada (rica en hidrógeno)

Si estaba claro que, a nivel médico, la ingesta de refrescos y bebidas azucaradas estaba provocando grandes daños en la salud de la población, que cada vez abusaba más de su consumo, también se ha empezado a demostrar que no siempre el agua embotellada es la mejor opción para beber. 

Su almacenaje, la fabricación de sus plásticos o, incluso, la temperatura pueden perjudicar seriamente el contenido, haciendo que, como demostró el Profesor Olea con un estudio del IBS de Granada, que la totalidad de las botellas contenían tóxicos. 

Por si esto fuera poco, hay que sumar más beneficios aún al agua alcalina. Ha sido también la Universidad de Almería, a través del trabajo realizado en laboratorio por el Grupo de Investigación UAL-AGR152 MODELIZACIÓN DIGESTIVA, la que ha dejado patente, tras su trabajo de investigación, que el agua alcalina es capaz, en el estómago, de disolver a través de la homeostasis gran parte de los residuos ácidos de una manera 100% natural.

Según se van cumpliendo años el cuerpo tiene mayor dificultad a la hora de neutralizar residuos ácidos, lo que le lleva a necesitar tirar de la reserva de minerales alcalinos como calcio, potasio o magnesio, pudiendo a medio plazo generar serios problemas como la osteoporosis y otras enfermedades.

“Este proceso afecta a veces hasta a los músculos, pues se disgrega el tejido muscular para eliminar un aminoácido alcalinizante llamado glutamina, y que el cuerpo utiliza en su proceso de recuperación y rescate del pH. Por mucho que trabajen los riñones o muy eficientes que sean produciendo y reciclando bicarbonatos alcalinizantes, estos órganos solo pueden liberar al cuerpo de una cantidad determinada de ácidos cada día”, explican desde Alkanatur.

A nivel antioxidante es donde más daño hacen los temidos radicales libres, atacando con más virulencia a las personas que hacen deporte, de ahí que tengan que prevenir más dicho problema. Hay multitud de estudios científicos que hablan de los beneficios de beber agua rica en hidrógeno, lo importante es que dicho hidrógeno sea estable y no se evapore fácilmente. Aquí resalta también la empresa gallega Alkanatur con un estudio relevante sobre cómo su agua es mucho más antioxidante que varias aguas minerales del mercado (Universidad de Almería), además de varios estudios preclínicos sobre varios tipos de tumores (Universidad Autónoma de Madrid- Consejo Superior de Investigaciones Científicas) o sobre diabetes tipo 1 (Universidad de Vigo) En todos estos estudios se demostró la mejora antioxidante.