García Castaño: “Pediría a la gente que se asocie y participe en construir ciudad”

Los cambios para una gran ciudad están también en los pequeños gestos. El primer concejal presidente del distrito Centro que no es del PP en décadas, Jorge García Castaño, antiguo militante de IU y actual de Ahora Madrid, propició uno sin darse cuenta, aunque en coherencia con lo que luego contó en la primera entrevista a un medio desde su toma de posesión: recibió a Somos Malasaña en su despacho de la Junta Municipal, una sala amplísima y con una mesa repleta de papeles y trabajo; un lugar que este periódico nunca pisó pese a haber entrevistado a dos de sus antecesores en el cargo, José Enrique Núñez y David Erguido, quienes nos citaron siempre lejos del lugar en el que tomaban sus decisiones.

Este gesto involuntario define bien la intención de “abrir el Ayuntamiento a la gente” que tiene García Castaño, uno de los conceptos que más repite durante la entrevista, concedida solo 10 días después de ser nombrado concejal presidente de Centro y de Chamberí. Convenimos con él en que con el poco tiempo que lleva en el cargo la conversación debería versar sobre asuntos generales, dado que sobre muchos temas concretos de los que nos gustaría hablar, si bien le son familiares, no dispone aún de un conocimiento profundo de sus particularidades y, mucho menos, tiene planes concretos sobre lo que hacer o dejar de hacer. No obstante, sobran clásicos que poner sobre la mesa.

La cita con García Castaño es a media tarde y confiesa que le queda aún mucho trabajo por delante en la jornada. El día anterior trató de citarnos a las 21:30 horas, cuando sacó un hueco en su apretadísima agenda; demasiado de noche ya para nosotros, que debíamos conciliar periodismo con vida familiar.

“Devolver el poder a la gente”

“Devolver el poder a la gente”

“Nuestro compromiso tiene que ser claro: conquistar el Ayuntamiento para devolver el poder a la gente”. Pivotando sobre esta frase de Jorge García Castaño, extraída de su ficha de presentación como candidato, y sobre la promesa electoral de Ahora Madrid de dar más poder a las juntas municipales, arrancamos preguntando al concejal cómo piensa conseguir esos objetivos. Explica que se debe fomentar la participación ciudadana en los plenos de las juntas de distrito modificando los reglamentos vigentes para facilitar así que se escuchen las voces de los vecinos, pero que como esos cambios llevarán su tiempo, porque han de seguir cauces administrativos heredados, a lo que animaría desde ya es a que la gente se asocie y se sume a defender causas y a construir la ciudad que quiere.

“Necesitamos interlocutores. La cosa está en tener con quien hablar”, asegura el concejal, ávido de saber de primera mano lo que ocurre en el distrito. Cuando le comentamos que conocemos en Malasaña un buen puñado de colectivos sociales activos que estarían interesados en concertar ya con él una entrevista en la que exponerle visiones y necesidades del barrio, afirma que agradecería que le facilitáramos sus contactos. “Yo vivo en Lavapiés y a veces a los de allí nos es difícil cruzar esa frontera imaginaria que es la Gran Vía y adentrarnos en territorios más al Norte, por lo que todo lo que me facilite conocer la realidad de los barrios de mis distritos será bien recibido”.

Sobre aumentar las capacidades de las Juntas Municipales, comenta que el proceso de descentralización del poder necesario para ello será lento, pero que no tiene tiempo que perder, por lo que mientras que se trabaja en pos de conseguir un ideal se debe avanzar poco a poco con lo que esté a su alcance. “Por el momento, desde las juntas ya hemos podido actuar sobre algo tan necesario y básico como los servicios sociales: desahucios, alimentación y desbloqueo de la ayuda a domicilio”. En septiembre estaremos preparados para actuar sobre temas de vivienda, vinculada a la Oficina de Desahucios, y de convivencia, todo lo relacionado con ruidos, limpieza y coches. Lo haremos abordando de manera integral cada uno de los problemas, avanzando primero por lo que estamos de acuerdo junto a vecinos, partidos políticos, comerciantes y demás y, posteriormente, tratando de solventar las posturas encontradas que puedan surgir por el camino. Somos partidarios de montar algunas mesas de diálogo para resolver ciertos asuntos que se vienen arrastrando de siempre, pero sobre todo queremos enfrentarnos a los temas conforme vayan surgiendo, estudiando en cada caso el mejor modelo para darles respuesta y empezando por donde haya quejas vecinales“.

APR y ruido

APR y ruido

Dicho esto, aprovechamos para hablar sobre la restricción del tráfico en los barrios de Universidad y Justicia. ¿Serán finalmente zonas sólo de prioridad residencial, tal y como prometió el equipo de Gobierno saliente pero sin llegarlo a materializar? “Yo vivo en una zona de tráfico restringido y personalmente creo que mi barrio ha ganado muchísimo desde que es APR, pero para saber si cerraremos o no Malasaña al tráfico debemos aún consultar con comerciantes y vecinos si es eso lo que verdaderamente quieren. Por el momento, esas Áreas de Prioridad Residencial, como la de Ópera, la cual se iba a aplicar con anterioridad, están suspendidas. Eso sí, espero que el de la movilidad sea uno de los temas que tratemos pronto, desde el diálogo social, viendo que es lo que la gente quiere y que por lo tanto cuenta con suficiente respaldo social”.

Otro de los males endémicos que sufren los vecinos de Malasaña es el del ruido... “El ruido, producido por múltiples causas, es un problema complejo. Es otro de esos temas que debemos tratar de forma integral y no sólo enfrentando en una mesa a vecinos y a empresarios de la noche, si hablamos del ruido producido por el ocio nocturno, sino escuchando a cuantos más interlocutores puedan verse afectados. Una solución total será difícil encontrarla, pero habrá que llegar a un acuerdo porque de lo que se trata es de, entre todos, intentar convivir. Dar una respuesta a este asunto está entre nuestras prioridades”, comenta el concejal, a quien enseguida testamos sobre lo que opina de la invasión de terrazas que está sufriendo la zona, con lo de ruido de más y ocupación de espacio en la vía pública que conlleva: “Está claro que es necesaria una regulación al respecto, ya que la actual no funciona. Pero antes de tomar cualquier tipo de medida necesitamos saber cuántas hay, saber lo que tenemos, algo que hoy por hoy desconocemos”.

El ruido y la suciedad es algo que también tiene que ver, por ejemplo, con que Malasaña sea un lugar que soporta un enorme número de visitantes. Ser un barrio de moda puede estar bien para muchas cosas, pero para otras, no tanto: ¿no necesitaría la zona un tratamiento especial?, preguntamos. La respuesta de García Castaño resulta, cuanto menos, curiosa pues habla de lo necesario que es seguir aumentando la llegada de turistas a Madrid, pero a su vez tratando de repartirlos por distintos distritos de la capital para esponjar zonas saturadas: “Centro no puede ser un parque temático. Aquí vive mucha gente. Sobre cómo gestionar el turismo Madrid debe aprender muchas cosas de Barcelona y, a su vez, mejorarlas y no reflejarnos en los fallos de su modelo; turismo sí, sobre-explotación, no”.

Los mecanismos de cogestión, fundamentales

Los mecanismos de cogestión, fundamentales

Pese a que le habíamos prometido no entrar demasiado en cosas concretas, es algo que no podemos evitar y casi al final de la entrevista exponemos al concejal una batería de temas sobre los que contestar de forma breve: su opinión sobre el Patio Maravillas, sobre procesos como el de la Plataforma Haciendo Jardines, las fiestas del Dos de Mayo, el parque de bomberos que se levantará en el solar de San Bernardo 68 o la supuesta infrautilización del centro cultural Conde Duque.

“Considero el proyecto del Patio Maravillas muy importante para la ciudad. Todos los mecanismos de cogestión son fundamentales. Otra cosa son los lugares donde se desarrollan y, en este sentido, evaluaremos las posibilidades que tenemos de inmuebles y solares municipales susceptibles de ser cedidos a todo tipo de entidades, aunque bien es verdad que en Centro hay poco espacio. Del mismo modo, veo positivos procesos de colaboración público-vecinal como el de la plataforma Haciendo Jardines. En cuanto a las fiestas del Dos de Mayo, por supuesto creo que el Ayuntamiento debe apoyarlas; lo que no tengo tan claro es cómo. Si ya funcionan bien como algo autogestionado a lo mejor deberíamos apostar por que sigan así; a lo mejor lo que no tiene sentido es contribuir a hacer unas fiestas que consisten en montar una especie de recinto ferial y llenarlo de contenido de calidad dudosa, como puede pasar en otros barrios. Sobre el parque de bomberos que se levantará en San Bernardo, desconozco los pormenores del proyecto, pero sí que pienso que es mejor que haya en el distrito un parque de bomberos a que no haya ninguno y no sé si habrá muchas otras alternativas donde poder ponerlo. En cualquier caso, es algo que estudiaré. Por último, sobre Conde Duque confieso que no sé muy bien el uso que se le está dando y, aunque esto tendrá que estar coordinado con Cultura, tened por seguro que nuestra postura será la de utilizar todo lo que podamos del centro cultural en beneficio del barrio y del distrito”.

Finalizamos la entrevista y nos despedimos del concejal. En la suntuosa sede de la junta de distrito, a simple vista, sólo queda él y el policía que custodia la entrada. Al principio de nuestra charla le habíamos hecho notar que, acostumbrados a visitas en legislaturas anteriores, nos extrañaba esa falta de gente que se percibía en el edificio, a lo que García Castaño contestó que, al menos de momento, eran pocos en el barco: tan sólo los cargos electos y los funcionarios, a los que agradecía la buena acogida que le habían prestado. No hablamos con él ni de tuits ni de su borrado masivo en torno a la explosión de la polémica que se llevó por delante a su compañero Guillermo Zapata; sí que le dejamos caer que para ser uno de los miembros más “radicales” del Ejecutivo de Manuela Carmena, según lo califica sistemáticamente alguna prensa conservadora, para nada nos había parecido fiero. Él, ajeno ya a polémicas de ese tipo, dice que lo único que le interesa es que le dejen centrarse en su quehacer político y que con todo lo que se le ha venido encima este año se quedará sin vacaciones.

Fernando

Hola Jorge, por favor no nos falles, centro necesita un cambio radical hoy es sinonimo de botellon, ruido y suciedad.

Vecinos Calle Tesoro

Por favor, limpieza en la Calle Tesoro ya. Está de suciendad hasta arriba y es insoportable la peste a orin que hay al lado del portal número 30, ya que viandantes y clientes del bar Cazador salen a hacer sus necesidades a ese hueco.

Solicitamos un respeto a los vecinos de esa calle y que la gente se comporte civicamente para cuidar las calles que pisamos todos los días.