Nuevo Hyundai Santa Fe: buque insignia de siete plazas
Presentado en el último Salón de Ginebra, ahora arrancan las ventas del nuevo Hyundai Santa Fe. El coche más grande, modelo de imagen, y buque insignia de la marca coreana alcanza su cuarta generación (se lanzó por primera vez en 2001) con unos niveles de calidad, tecnología y finura dinámica soberbios. Quizás, dejando al margen a Genesis como marca independiente de lujo, estemos ante el mejor vehículo fabricado por el Grupo Hyundai-Kia hasta la fecha.
Como tal, se trata de un modelo cuyas ventas serán residuales, apenas 1.200 unidades en un año completo en España. Compite en la categoría de SUV grandes, cuya penetración disminuye en favor de SUV compactos y urbanos, y los pocos que se venden tienen como protagonistas a las marcas premium. De hecho, el salto de calidad es tan importante que Hyundai coloca al nuevo Santa Fe más cerca de modelos como los Volvo XC60 o Audi Q5 que de los Nissan X-Trail o Skoda Kodiaq.
Para defender su posicionamiento, Hyundai elimina la carrocería alargada Gran Santa Fe e incrementa sensiblemente el tamaño del Santa Fe respecto a su predecesor. En total, esta cuarta generación mide 4,77 metros (ocho centímetros más que antes) y en España únicamente se vende con siete plazas de asientos, logrando un volumen de maletero de 625 litros abatiendo las dos últimas plazas.
No es difícil intuir en su diseño exterior similitudes con los últimos lanzamientos de la marca, siendo especialmente fuerte el recuerdo del Hyundai Kona. Sobrado de robustez en la zaga o en el lateral gracias a unos pasos de ruedas ensanchados, el nuevo Santa Fe destaca por un frontal presidido por la parrilla “en cascada” y hexagonal de su hermano pequeño, pero en esta ocasión con unos grupos ópticos de LED unidos a ella por una moldura cromada. Además, hay cuatro nuevos diseños de llantas (entre 17 y 19 pulgadas) y 10 colores distintos para la carrocería que pueden combinarse indistintamente con tres tapicerías interiores.
El interior del Hyundai Santa Fe cambia por completo, adaptando en el centro de su salpicadero la pantalla flotante multifunción, de siete u ocho pulgadas según el acabado, como los últimos Hyundai, al tiempo que ofrece un salto de calidad en materiales y terminaciones a la altura de los modelos más lujosos.
Además, el conductor se encuentra con un puesto de mando más práctico y ergonómico, destacando la pantalla digital a color de siete pulgadas, ubicada en el centro del cuadro de instrumentos y que varía de diseño y color en función del programa de conducción utilizado. Por primera vez en Hyundai, el Santa Fe dispone de un sistema full head-up display (HUD), que proyecta la información de conducción relevante directamente sobre el parabrisas.
En el apartado de conectividad, el nuevo Hyundai Santa Fe ofrece Display Auto para que los usuarios, conectando sus teléfonos móviles a través de Apple CarPlay o Android Auto, puedan usar entre otras aplicaciones la navegación de su smartphone que se proyecta en la pantalla central. El sistema tiene reconcomiendo por voz. En el apartado de gadget tech, el Santa Fe incorpora un sistema de carga inductiva para el móvil sin necesidad de cables.
Entre las novedades en seguridad activa, dentro del paquete Hyundai SmartSense, destacan el sistema de alerta de pasajeros en las plazas posteriores y el asistente de salida segura. El primero monitoriza los asientos traseros y avisa si están ocupados al salir del coche, alertando en tal caso con la activación del claxon y luces. El segundo, cuando el condcutor desbloquea el seguro de las puertas y el sistema detecta tráfico que se aproxima por detrás, el Santa Fe mantiene el seguro puesto y emite una advertencia acústica.
La gama de motores está compuesta por dos bloques diésel y uno de gasolina, quedando para el próximo año la llegada de versiones híbridas enchufables. Entre los primeros están el 2.0 CRDi de 150 caballos y 400 Nm, asociado al cambio manual y a la tracción delantera, y el 2.2 CRDi de 200 CV, con tracción a las cuatro ruedas y transmisión automática de ocho velocidades. Por su parte, el único motor de gasolina es un 2.4 de 185 CV que ofrece 241 Nm de par, estando disponible con cambio automático de seis velocidades y tracción total.
Las versiones con tracción total están basadas en el nuevo sistema HTRAC, desarrollado por Hyundai, y que controla la entrega de potencia de las ruedas de forma variable. Esta relación en el reparto de la potencia varía en función de las condiciones de la calzada, pero también se puede programar a través de los cuatro modos de conducción establecidos: Eco, Comfort, Sport o Smart. Esta tracción llega, en caso necesario, a repartir el 50 por ciento de la potencia a las ruedas traseras.
Por último, Hyundai ha revisado el esquema de suspensiones y la dirección, así como ha aumentado la rigidez torsional en un 15 por ciento respecto al modelo saliente, obteniendo una mejor estabilidad de marcha. Además, la calidad de rodadura se beneficia de un mejor aislamiento acústico del habitáculo y un tarado de la amortiguación más amable que reduce las vibraciones y la aspereza del asfalto durante la conducción.
La cuarta generación del Hyundai Santa Fe, disponible en los concesionarios desde 33.00 euros, irrumpe en un momento dulce para la marca después de haber firmado un histórico récord en ventas el pasado mes de agosto (Top 5 en el canal de particulares) y con una oferta de producto que tendrá continuidad las próximas semanas con el lanzamiento de un Hyundai Tucson actualizado y la versión eléctrica del Hyundai Kona.
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