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Podemos quiere sentar a un veterinario animalista en el Consejo de Asuntos Taurinos de Andalucía

Lidia de un toro en la plaza de Las Ventas. Foto: AVATMA

Olga Granado

Podemos quiere formar parte del Consejo de Asuntos Taurinos de Andalucía, pero con un objetivo: combatir la llamada fiesta nacional desde dentro. El partido se ha manifestado en contra de esta tradición –si bien ha descartado prohibir las corridas de toros– y lleva en su programa electoral para el 20 de diciembre eliminar toda financiación pública para ello. Y ahora, desde el grupo parlamentario de Podemos, que es el que eleva la candidatura, han precisado que propondrán a un veterinario antitaurino para el consejo.

Es decir, lo sentarán en un órgano formado, entre otros, por representantes del sector, como los empresarios del mundo del toro, los cirujanos taurinos, las uniones de ganaderos más representativas del territorio, las asociaciones de picadores y banderilleros e incluso dos presidentes de plazas de toros de primera y segunda categoría de la comunidad autónoma.

Se trata de Rafael Luna Murillo, animalista, natural de Córdoba, licenciado en veterinaria desde 1990 y especialista en diagnóstico de parasitológico por la Universidad Complutense de Madrid. Es también colaborador del partido Equo con “ideas para mejorar el bienestar de los animales”. De este modo, en el próximo pleno, Podemos propondrá su candidatura para ocupar una de las cuatro vocalías que se reservan para el Parlamento de Andalucía en este órgano. También presentarán a sus respectivos candidatos el PSOE-A y el PP-A, y los que no lo harán serán IU y Ciudadanos. De manera que de las cuatro vocalías por elección del Parlamento de Andalucía quedaría una vacante. Sus integrantes no cobran por ello, ni siquiera dietas.

El Consejo de Asuntos Taurinos de Andalucía depende de la Consejería de Justicia e Interior y tiene como objetivo contribuir “a la adecuada adopción de las decisiones” en materia de espectáculos taurinos. Entre sus funciones: emitir informes sobre los asuntos relacionados con los espectáculos taurinos que sean sometidos a su consideración por la Junta de Andalucía; proponer cuantas medidas estime oportunas para el fomento y protección de esta tradición; informar en los anteproyectos de leyes y proyectos de reglamentos en la materia que vayan ser sometidos a la aprobación del Consejo de Gobierno.

El programa con el que Podemos concurrió a las elecciones autonómicas del 22 de marzo no incluía ninguna mención sobre la tauromaquia. Sí las hay en el programa electoral para el 20 de diciembre. Podemos promete, entre otras cosas, la elaboración de una Ley Estatal de Bienestar Animal y “revisar todos los espectáculos que impliquen confinamiento de animales y/o maltrato”. También incluye el compromiso de “subvención cero para los espectáculos con animales que no aseguren su bienestar” y la modificación de la Ley 18/2013, de 12 de noviembre, para la Regulación de la Tauromaquia como Patrimonio Cultural.

El caso es que el partido liderado por Pablo Iglesias ha ido relajando su frente contra la tauromaquia. De hecho, el líder comentaba no hace mucho que no le gustan los espectáculos taurinos, pero que no es partidario de la prohibición de las corridas de toros. Ya en el programa electoral para las elecciones autonómicas en Madrid el 27 de mayo se descartó. Es más, Podemos ya tiene hasta un círculo taurino, con muy pocos seguidores, eso sí.

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