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¿Quo vadis EITB, a las trincheras?

Maite Iturbe, directora general de EiTB.

Aitor Guenaga

Vuelve la marejada a EITB. “Esta Dirección no desea ninguna polémica adicional, pero no acepta relatos interesados, ni estrategias sindicales cuya finalidad podría estar ligada a tiempos electorales. Especialmente cuando los interlocutores tenemos negociaciones pendientes: está pendiente negociar la plantilla estructural de EITB, el modelo de organización por grupos profesionales, las carreras profesionales para que los profesionales no sigan necesariamente en la misma misma función toda su vida profesional. En consecuencia, la Dirección invita a los representantes de la parte social a iniciar los contactos y las conversaciones. No podemos permitirnos jugar con el futuro de EITB. Estamos en tiempo de diálogo y negociación, no de trincheras”.

Así se expresaba esta semana la dirección de la radiotelevisión vasca en un comunicado inédito en el que cargaba contra los sindicatos del ente y su exigencia de cese del director de Recursos Humanos, Javier Salcedo, al tiempo que se criticaba el cese de un editor “por motivos ideológicos” y se exigía la revocación de la citada medida. Un directivo, Salcedo, para el que el Parlamento vasco de forma mayoritaria reclamó también su cese el pasado mes de febrero. 

Un cruce de comunicados inédito en este conflictivo periodo de Maite Iturbe como directora general, pese a que el ente acaba de salir de un ERE traumático que ha dejado heridas muy profundas en Eusko Irratia y que se ha prolongado en el tiempo, desgastando a la plantilla y sometiéndola a una presión de alto voltaje. Tanto que un grupo de 'notables' de las tres emisoras públicas esperan aun ser recibidos por el lehendakari para hablar sobre la situación que se arrastra en las emisoras desde que estallara oficialmente el ERE. La petición se cursó el pasado 15 de junio por carta y de momento serán recibidos por la consejera de Educación, Cristina Uriarte.

Una situación que ha sido calificado de “grave” por los impulsores de la iniciativa que, en principio, busca compartir con el máximo responsable político vasco una “reflexión profesional y humana sobre los momentos que nos están tocando vivir, y sobre el incierto futuro que creemos se abre en Eusko Irratia”.

Cuando el ERE era ya apenas un rescoldo, con una radio lanzada con la nueva programación y pendiente de conocer los niveles de audiencia tras la pérdida del 20% del empleo que se llevara el ERE cuando finalice su ejecución en junio de 2016, estalla una nueva crisis. Los socialistas ya lo había advertido: “la gestión del ERE en Eusko Irratia iba a condenar a este servicio público a una conflictividad permanente”, en palabras del parlamentario socialista y miembro del Consejo de Administración, Mikel Unzalu.

Comunicados sindicales que el equipo de Maite Iturbe, interpreta, tienen un claro “propósito de presionar a la dirección”. El comunicado del equipo que dirige Maite Iturbe ha causado “estupor y asombro” a partes iguales en la redacción del ente público, que asiste atónita a un emprobrecimiento.

En este contexto de polémica y enfrentamiento, EITB celebra la próxima semana un Consejo de Administración con una guerra abierta entre los sindicatos y la dirección, el desplome de las audiencias y el reto de negociar la plantilla estructural del ente y su modelo de organización. Y Unzalu considera que este “contexto de conflicto va a hacer difícil ese consenso con la parte sindical en lo que queda de mandato, justo cuando EITB se enfrenta a una encrucijada sobre su viabilidad futura, con una necesidad de adaptación de todas su estructuras que los actuales gestores se niegan a abordar”, explica. 

La dirección de EITB ha reconocido en ese foro su preocupación por el devenir de las audiencias. La propia Iturbe lo ha verbalizado, aunque siempre contextualizándolo e intentando descargar responsabilidades en la influencia de los canales de TDT y con poca autocrítica sobre los magros resultados (salvo contadísimas excepciones como el éxito del 'reality' que conduce la sevillana Reyes Prados 'Tú al norte yo al sur') de las nuevas apuestas de la parrilla. Los números son la prueba del algodón a los que se enfrenta este equipo de dirección: Tras haber cosechado el peor registro histórico mensual en septiembre, Euskal Telebista puede terminar el año con el peor dato desde que existe la actual medición de audiencias (1992). A estas altura de año, arrastra una media del 10,7% entre los tres canales, con ETB1 y ETB 2 en su audiencia más baja, 1,9% y 8,2% respectivamente, pese a que la dirección se ha volcado en reforzar el canal en euskera

O aduciendo los presupuestos públicos con los que cuenta el ente vasco en comparación con otras cadenas privadas. Ahora además que hemos conocido, según ha adelantado El Correo esta misma semana, que la radiotelevisión pública vasca recibirá 4,3 millones más de fondos públicos en 2016, mientras los ingresos propios se incrementan solo en 726.127 euros. En total, EITB controlará un presupuesto de 129.803 millones de euros, tras tres últimos ejercicios en los que se han realizado “políticas de ajuste de gran calado”, según reconoce el ente.

Lo mas previsible es que el lehendakari no reciba a los 'notables' de Eusko Irratia, que la actual dirección de EITB mantenga la velocidad de crucero del ente sin llegar a abordar -o al menos a culminar en esta legislatura- los aspectos estructurales a los que se refería la propia Iturbe en su inédita nota en la que cargaba contra los representantes sociales de la plantilla. Y que el futuro de EITB quede 'ad calendas graecas'. O más bien, a la posibilidad de un “acuerdo de país” en torno al futuro de EITB en la siguiente legislatura autonómica con un no descartable acuerdo entre peneuvistas y socialistas, algo que el PSE de Idoia Mendia no tiene previsto 'regalar' en el actual mandato.

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