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El PP irrumpe en bastiones socialistas de Cádiz: la resaca más dolorosa para la izquierda gaditana

Javier Pizarro, alcalde de Alcalá de los Gazules.

Francisco J. Jiménez

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La resaca electoral en la provincia de Cádiz deja un panorama inquietante para el PSOE de cara a los comicios municipales del próximo año. Poblaciones que históricamente habían sido bastiones socialistas han dado un giro inesperado hacia la derecha. No es nada raro que ciudades como Jerez o algunas del Campo de Gibraltar o de la Costa Noroeste den un vuelco porque ha sucedido en otros momentos, pero que esto acontezca en la Sierra o en La Janda es muy llamativo.

Los populares se han impuesto en el 90% de las poblaciones de la provincia gaditana y lo han hecho en reductos socialistas como Alcalá de los Gazules. Es algo histórico porque en 2018, sin ir más lejos, el PSOE había triplicado en esta localidad a los populares y ahora estos han ganado por 85 votos. Junto con Dos Hermanas era el único punto de Andalucía donde nunca había perdido unas elecciones el PSOE, pero el domingo todo cambió.

La entrada del Partido Popular en el mundo rural es noticia, ya que hasta este momento era territorio hostil. Incluso ha sido capaz de ganar en Puerto Real, el paradigma de una ciudad de izquierdas muy ligada a la lucha obrera. El PSOE gobierna en la actualidad en esta localidad, pero en los últimos años las alternativas siempre habían sido otras fuerzas progresistas.

La “resistencia” de Trebujena

La población que ha sido capaz de resistir a la derecha es Trebujena. Allí se ha impuesto claramente Por Andalucía, que solo ha sido la lista más votada en esta población, donde ha alcanzado casi un 47%. En la Costa Noroeste es una excepción, aunque ya en 2018 la fuerza más votada fue Adelante Andalucía.

Zahara, Torre Alháquime y Alcalá del Valle han sido las tres únicas poblaciones que no han dado el vuelco hacia el PP en la Sierra gaditana. Algar, Arcos, Benaocaz, Bornos, El Bosque, El Gastor, Espera, Grazalema, Olvera, Prado del Rey, Puerto Serrano, Setenil, Ubrique, Villaluenga y Villamartín se han pintado de azul. Lo de Villaluenga merece su comentario, contando con un alcalde y senador en la persona del socialista Alfonso Moscoso que lleva 23 años en el sillón del poder.

La misma dinámica se ha dado en la Bahía, con victorias del PP en Cádiz, con el doble de votos que el PSOE; y en Jerez, donde también se ha producido una victoria holgada de la lista encabezada por Ana Mestre. En Algeciras puede ser normal porque ya manda el popular José Ignacio Landaluce, aunque no tanto en La Línea, donde la alcaldía es para un partido municipalista. A Juan Marín ni siquiera lo apoyaron en Sanlúcar de Barrameda, donde Ciudadanos cayó a la quinta posición después de haber sido en 2018 la más votada.

El viaje al centro de Juan Manuel Moreno ha recibido el respaldo de una provincia donde actualmente gobierna el PSOE en casi la mitad de las alcaldías. Habrá que ver si estos resultados tienen una proyección en las municipales de 2023. O no.

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