Navalips, la mayor operación residencial en Cádiz de las últimas décadas

Cádiz va a emprender la mayor operación urbanística en materia de vivienda de las últimas décadas. La empresa estatal Sepides (perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, SEPI), propietaria de los terrenos de Navalips (en el polígono exterior de la ciudad), la Zona Franca de Cádiz y el Ayuntamiento de Cádiz se han unido para afrontar la urbanización de los terrenos de la antigua fábrica de hélices y de los solares contiguos con el objetivo de construir viviendas, equipamientos públicos y comercios.

El proyecto nace de la colaboración institucional y puede ver la luz tras más de dos años de trabajo, muchos meses que se materializaron el pasado 4 de febrero con la firma en las instalaciones de la Zona Franca de Cádiz de un protocolo entre el presidente de Sepides, Antonio Miguel Cervera; el delegado Especial del Estado de la Zona Franca de Cádiz; Francisco González Pérez; y el alcalde de Cádiz, José María González Santos, con el fin de impulsar la transformación urbanística de los terrenos. El acto estuvo presidido por la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.

El plan supone construir más de 800 viviendas, la mitad de ellas protegidas, y más de 10.000 metros cuadrados de zonas verdes con el fin de mejorar la oferta residencial en Cádiz, favorecer la integración de infraestructuras viarias existentes y la conexión del barrio de Loreto con la Zona Franca de Cádiz exterior, promoviendo una oferta de equipamientos coherentes y próximos enfocados al ciudadano.

Repensar el modelo residencial de Cádiz 

Esta es, quizás, la última oportunidad residencial de este calado que va a tener Cádiz, una ciudad colmatada y con una importante carencia de viviendas que obliga a un éxodo poblacional a municipios cercanos. 

Por ello, ante la enorme complicación para desarrollar estos terrenos con los mecanismos actuales y con el principal objetivo de proyectar casi 80.000 metros cuadrados con una mirada del siglo XXI las tres administraciones llevan más de dos años trabajando conjuntamente para ver la mejor manera de poder hacerlos productivos, planteándose de manera conjunta que es necesario modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Con el fin de agilizar los plazos, se decide hacerlo a través de un instrumento PGOU y denominado Plan Especial de Reforma Interior (PERI).

La propuesta presentada apuesta por un modelo de gestión realista y que haga viable su ejecución. Se prevé que el ámbito quede dividido en diferentes unidades de ejecución y con la posibilidad de desarrollarse de manera independiente y por fases. La transformación permitirá la creación de un barrio mixto, ya que a la parte de viviendas se la acompañará de 10.617 metros cuadrados de suelo terciario para la creación de espacios de trabajo y comercio de cercanía. 

Lo cierto es que el PERI aún necesitará su tiempo de cocción, unos 18 meses, pero durante el mismo se pretende ir trabajando en la urbanización del suelo. Precisamente, Nuria Ródenas, arquitecta en Gestión de Proyectos de Sepides, ha dado un dato durante unas jornadas en Cádiz y es que espera que en dos años y medio puedan estar concluidos todos los trámites para poder ver las máquinas trabajando en los terrenos de la antigua fábrica de hélices navales. Para ello, señaló que lo fundamental es la colaboración entre las tres administraciones y que la fórmula que se ha buscado descarta que haya que llevar a cabo una modificación del PGOU, que lo retrasaría más.