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El Principado presenta un proyecto para Perlora tras 20 años de ciudad vacacional en ruinas

Edificio abandonado en la Ciudad de Vacaciones de Perlora

Raquel L. MURIAS

Oviedo —
14 de agosto de 2025 14:36 h

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El 2026 se cumplirán veinte años desde que Perlora, la ciudad de vacaciones a la que más bombo se le ha dado en Asturias, echase su cierre definitivo. Fue el Principado el que tuvo que clausurar definitivamente este espacio y desde entonces se han sucedido decenas de proyectos que nunca se han concretado en nada. Hoy, Perlora es una ciudad de vacaciones fantasma.

Destino vacacional de miles de familias

El Gobierno del Principado y el ayuntamiento de Carreño han anunciado el que se espera que sea el plan definitivo para lar ecuperación residencial de este espacio que ahora se ha bautizado como Nueva Perlora. El objetivo del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) registrado en el Ayuntamiento de Carreño, pretende abrir una nueva etapa en el histórico complejo, que fue durante décadas un destino ideal de vacaciones para miles de familias asturianas y de toda España.

Aprobación inicial en 2026

La redacción del plan ha sido consensuada entre la Administración autonómica y la municipal. La voluntad de ambas administraciones es que el acuerdo impulse con la mayor agilidad posible la tramitación urbanística, así como todos los demás compromisos previstos. Con un calendario estimativo, el ayuntamiento realizará la aprobación inicial a principios de 2026 y la definitiva a finales de 2026.

De forma simultánea, el Principado procederá a avanzar en los trabajos preparatorios de las licitaciones, para no perder tiempo alguno y sin esperar a que concluyan los procesos urbanísticos.

Modelo sostenible

En palabras de la vicepresidenta, Gimena Llamedo, “Perlora se convertirá así en un ejemplo del modelo sostenible y de calidad que ha hecho de Asturias una potencia turística”.

El auge del turismo acrecienta las oportunidades de revitalización de la ciudad residencial. “Sabemos que han pasado demasiados años sin buenas noticias para Perlora, pero estamos en un momento idóneo para aprovechar todo su potencial con la creación de actividad económica y puestos de trabajo en beneficio de Carreño y de toda Asturias”, ha añadido.

Espacio público

Llamedo ha abundado en la importancia de preservar el interés general: “Perlora se mantendrá como espacio público para el uso y disfrute de toda la ciudadanía. No olvidemos el elevado valor sentimental e identitario que la ciudad de vacaciones tiene para muchísimas familias asturianas y, de manera especial, para los vecinos y las vecinas de Carreño”.

En ese mismo sentido, ha resaltado: “Perlora es un patrimonio común que queremos cuidar y revitalizar. Seguirá siendo de todas y de todos”.

IU defiende respetar la imagen original

Ovidio Zapico, consejero de Ordenación de Territorio, Urbanismo, Vivienda y Derechos Ciudadanos: “De esta forma se respetará la imagen original y también la capacidad de carga de Perlora. Consideramos que la imprescindible puesta en funcionamiento del complejo no debe comprometer el equilibrio ecológico y funcional del entorno. Por ello, optamos por no agotar la edificabilidad que otorga el Plan General, minorándola un 20%.

Se trata de favorecer la convivencia de la nueva actividad con el uso habitual de las playas y los espacios libres de la zona y de controlar el impacto de la recuperación de Perlora sobre las infraestructuras, las playas y el paisaje, garantizando así la sostenibilidad medioambiental de este enclave natural.“

Una base consensuada

Ángel Manuel García, alcalde de Carreño: “Hoy es un día importante para el concejo. Desde que llegamos a la alcaldía, nos propusimos este objetivo y, tras muchos años de parálisis y abandono, por fin se da un paso importante para recuperar Perlora. Este PEPRI sienta la base y abre el camino para recuperar un activo de toda Asturias. Carreño gana con este documento: gana terreno, gana costa, gana servicios y gana autonomía en el mejor espacio natural de la costa asturiana. Creo sinceramente que hemos cumplido con nuestro deber y hemos hecho un buen trabajo, cuidando el espacio y asegurando un buen futuro para el complejo. Ya tenemos la base consensuada, hagamos ahora realidad Perlora”.

Cambio de estrategia

En un principio se había barajado un plan especial de reforma, un PERI. Ahora, se ha elegido una figura distinta, un plan de protección y reforma, un PEPRI, porque responde mejor a los fines previstos. El documento se estructura en torno a tres objetivos principales.

Más aparcamientos

En primer término se llevará a cabo una mejora de los accesos y servicios (equipamientos de socorrismo, aseos, chiringuitos) de las playas de Carranques y Les Huelgues, que mantendrán su carácter público y abierto a la ciudadanía.

Para ello, está prevista la construcción de un nuevo vial, paralelo a las vías del tren. Esta calle conectará con los aparcamientos actuales de las playas y contará con 230 nuevas plazas.

Cierres entre chalés

También se contempla dar prioridad a los peatones, estableciendo el libre uso peatonal de los viales interiores, que cuentan con protección específica. El documento favorece la construcción de espacios para peatones y restringirá el uso de los vehículos privados, salvo para los usuarios del complejo.

Para preservar el espíritu de la ciudad jardín y la unidad del conjunto arquitectónico y paisajístico, se prohíben los cierres entre chalés. También se protegerá un ejemplar de cada una de las 31 tipologías de edificaciones existentes. El actual catálogo sólo recogía la protección de las 22 villas ubicadas en la manzana más occidental.

Conservación de edificios

El catálogo propone la conservación de la iglesia, el bar La Cabaña y Villa Homes, uno de los chalés con forma de hórreo. También plantea conservar el edificio de recepción-dirección, actualmente sin protección, y uno de los más representativos del complejo.

Para no comprometer el equilibrio ecológico y funcional, el plan minora un 20% la edificabilidad prevista en el ordenamiento general.

Dar vida todo el año

El propósito central del plan Nueva Perlora es recuperar el uso de la ciudad residencial, preferentemente turístico, mediante una concesión de explotación a largo plazo. La rehabilitación integral del espacio formará parte del canon que tendrá que satisfacer la concesionaria.

Junto con el uso turístico, se posibilitan otros auxiliares y compatibles que contribuyan a dar vida al complejo todo el año.

Más espacios verdes

El Gobierno de Asturias también ha asumido otros compromisos con el Ayuntamiento de Carreño, entre ellos, la cesión este año de varias parcelas al consistorio, que supondrán una mejora de espacios verdes destinados al uso público.

Tras veinte años en ruinas todo apunta a que esta vez el proyecto de Nueva Perola conseguirá devolver la vida y el uso a uno de los entornos más emblemáticos de Asturias.

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