Simulan un aborto en mitad de la calle para protestar contra la ley de Gallardón

Ayer por la mañana, grupos feministas de la Margen Izquierda y la zona minera practicaron un aborto en mitad de la calle en Barakaldo. Ante el palacio de justicia de la localidad fabril, después de advertir de lo que iba a ocurrir a los viandantes impresionables, una sanitaria ofreció un pastilla a una chica que quería interrumpir su embarazo. Ella se la tomó y se acabó la operación. Más de la mitad de los 100.000 abortos que tienen lugar cada año en el Estado se realizan de esta manera, mediante la ingestión de un fármaco y sin necesidad de intervención quirúrgica alguna.

Con esta representación, los colectivos feministas quisieron hacer ver que “la realidad no es siempre más dañina que la ficción” para protestar contra la reforma de la ley del ministro Gallardón. También quisieron poner de manifiesto la realidad del aborto. Según la asociación de clínicas acreditadas para la interrupción del embarazo (ACAI), algo más de 100.000 mujeres abortaron de forma voluntaria en España en 2012. El 98% lo hicieron antes de la décimo cuarta semana de gestación y el 54% antes de la séptima, cuando todavía se puede realizar por el procedimiento farmacológico.

En Euskadi, el número de mujeres que interrumpieron su embarazo de forma voluntaria el año pasado fue algo superior a 4.000. Todas ellas tienen actualmente la opción de acudir a Osakidetza, que garantiza la aplicación gratuita del procedimiento. Sin embargo, el servicio vasco de salud deriva este tipo de interrupciones a clínicas privadas. Si la nueva ley de Gallardón hubiera estado ya en vigor todas ellas serían consideradas delincuentes.

Desde el punto de vista de los colectivos feministas “el aborto no es un delito sino un derecho”. Advierten de que si se aprueba la ley con su redacción actual “nos veremos obligadas a volver a crear redes clandestinas para apoyar a las mujeres que quieren abortar”. Su principal petición en estos momentos es que Gallardón vuelva a meter su ley en un cajón, pero sus aspiraciones no se quedan sólo en eso.

Lore Fernández, portavoz del movimiento para la Magen Izquierda y zona minera, explica sus reivindicaciones: “Lo que nosotras queremos es que sea gratuito y completamente libre, incluso la ley de plazos nos parece restrictiva”. “Lo único que pedimos es que las mujeres podamos elegir libremente sobre nuestra maternidad”, asegura. El lema con el que ayer se manifestaron ella y sus compañeras, “nuestro cuerpo, nuestra decisión”, apunta también esa misma dirección.

La activistas feministas ven que la amenaza más inminente viene ahora mismo desde el Congreso de los diputados, pero también creen que en Euskadi queda todavía camino por recorrer para que la interrupción voluntaria del embarazo sea vista con naturalidad. Por ejemplo, no les agrada que Osakidetza derive todos los abortos a clínicas concertadas.“Lo hacen porque no quieren que la gente vea una planta de abortos en los hospitales públicos”, censuró ayer la portavoz de los movimientos feministas. Por eso su reivindicación es que el aborto sea libre, gratuito y “a la vista, no escondido”, o lo que es lo mismo, que se pueda practicar en los centros sanitarios públicos.

Los colectivos feministas hicieron un llamamiento para continuar con las movilizaciones para mañana por la tarde también en Barakaldo. La concentración se celebrará a las 19:00 horas en la plaza Bide Onera frente a los juzgados de la localidad fabril.