La FEMP rectifica y ahora invita a los municipios a dar “un paso al frente”
La postura de la Federación de Municipios de España (FEMP) sobre la crisis migratoria ha dado un giro de 180 grados en apenas unas horas. Si este jueves el máximo responsable de la institución criticaba el plan de acogida municipal impulsado por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, Íñigo de la Serna dice ahora que los municipios deben dar “un paso al frente” para atender a los refugiados como Administración más próxima a quien lo necesita.
Así, De la Serna ha postulado a la FEMP como el órgano que “liderará” junto al Gobierno central la respuesta del municipalismo al drama humanitario y, en este sentido, considera que “la participación de municipios y ciudades es fundamental”. Por ello, ha convocado con carácter extraordinario varias Comisiones de la Federación, que no se reunirán hasta el jueves de la próxima semana.
El también alcalde de Santander reconoce “las iniciativas emprendidas desde diversos puntos de nuestro país y de toda Europa” y pone de relieve que los Gobiernos Locales pueden resultar de “gran ayuda”. “Ahora es el momento de coordinar todas esas propuestas para poder dar, de forma ordenada, solución a un problema creciente”, afirma el regidor municipal, que ayer calificaba de “grave error” que algunos ayuntamientos planteen medidas.
De esta forma, la FEMP, según su presidente, actuará como instrumento para articular mecanismos eficaces ante una situación que requiere de una actuación no sólo urgente sino también sostenible en el tiempo.
Esta vuelta de tuerca en la FEMP es semejante a la emprendida por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, que este viernes ha anunciado la creación de una comisión sobre refugiados cinco después después de decir que “la acogida está saturada”.
La semana pasada, la vicepresidenta, María José Saénz de Buruaga, aseguraba que la capacidad de acogida a los refugiados “está saturada”, que España ya acogía “a muchos inmigrantes en situación irregular” y eso debía tenerse en cuenta. Este viernes ha anunciado la creación de una comisión específica interministerial que convoque a las comunidades y una representación de los municipios para estudiar “la mejor manera para acoger” los demandantes de asilo que pide la Comisión Europea.
