Controlado el incendio en la finca Zurraquín en Toledo, donde continúan trabajando un medio y 5 personas
Un medio terrestre y cinco personas continúan este domingo por la tarde en las labores de extinción del incendio forestal, donde el fuego ha quedado controlado a las 12.36 horas, según informa el Sistema de Información de Incendios Forestales. El fuego se declaró a las 13.00 horas de este pasado viernes en la finca Zurraquín, en el término municipal de Toledo.
El incendio sigue catalogado en nivel 0 y aunque está estabilizado desde la noche del viernes, todavía no se da por controlado. Según se estimaba ya el mismo viernes, el incendio habría arrasado unas 900 hectáreas de terreno de pastos y matorral, tal y como señaló el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero.
No obstante, este sábado se reavivaba el fuego a la altura del kilometro 6 de la CM-4000, en la finca Hernán Páez, protegiendo la casa de la finca, pero también conteniendo el avance del fuego en el monte, según señalaba el Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Toledo, que ha publicado diversas imágenes de cómo ha quedado el paisajes “después de la batalla”.
Entre las fotos, muestran un terreno calcinado en el que al fondo de la imagen se sitúa el arroyo de Guajaraz, el de Vallejo de la Cierva, así como vistas del valle de Guajaraz y sus laderas y otro arroyo sin nombre.
Respecto al viernes, los bomberos municipales señalan que trabajaron en el flanco derecho del fuego, en el arroyo sin nombre y en el arroyo del Vallejo de la Cierva; luego se trasladaron a la cabeza de fuego, en el flanco izquierdo y actuaron en la Dehesa del Aceituno, conteniendo el fuego en el arroyo del Aceituno y, finalmente, intervinieron en la Finca de Palomilla.
Dos corzos escapan de las llamas
El incendio obligó a evacuar de manera preventiva el parque de ocio Puy du Fou, de donde desalojaron a más 3.000 personas y a cientos de animales. Sin embargo, en la finca Zurraquín otros muchos animales han tenido que protegerse el fuego por su cuenta, tal y como muestra la imagen que tomó Javier Nicolau, en la que se puede apreciar a dos corzos frente a las llamas.
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