José Manuel Zamora: “Abycine no sólo es un proyecto cultural, es de región y de ciudad”
En la clausura de Abycine, el Festival Internacional de Cine de Albacete, el que ha sido su director desde sus comienzos ya hace más de 18 años, anunció que dejaría de estar al frente del proyecto. Las razones: la falta de un apoyo y una apuesta “decidida” por parte de las instituciones. A pesar de que en su última edición, el evento recibió unos 23.000 espectadores y los precios entregados llegaron a alrededor de 55.000 euros, José Manuel Zamora anunciaba que el “incierto futuro” del certamen era la razón de su salida.
Profesionales de la industria apoyaron la decisión del director y su equipo, como Borja Cobeaga ('Ocho apellidos vascos'), puntualizaba que el “éxito debe tener recompensas” mientras que Juan Miguel del Castillo ('Techo y Comida') aseguraba que el posible fin de Abycine era una “grán pérdida que las instituciones no deberían permitir”. Y así, en 2017 llegó el apoyo institucional y se consolidó también la XIX edición del festival, que se celebrará a finales de este año, uno de los anuncios que se consolidó en la pasada Feria Internacional de Turismo.
Junto al festival, continuaría también Zamora. El director explica que en 2016 se llegó a un punto de “no retorno” en la historia del Festival y que el apoyo real y decidido de las diferentes administraciones. “Necesitábamos clarificar la hoja de ruta: hacia dónde íbamos, si íbamos a seguir creciendo o no. Teníamos que apuntalar todo lo que teníamos y por eso necesitabamos el apoyo institucional”, explica a eldiarioclm.es. Además, explica que los cambios que se deben llevar a cabo no son sólo presupuestarios, sino que tienen muchas ramas, en las que se debe ir trabajando desde ya.
Por ejemplo, a nivel administrativo y jurídico, Abycine necesita ya tener otra figura organizativa y para este cambio ya existen plazos en conjunto con las instituciones como el Ayuntamiento, Diputación o, incluso, la Junta de Comunidades. “Abycine no sólo es un proyecto cultural, sino que es de región y también de ciudad”, explica Zamora, quien señala la importancia de los retornos que ha tenido hasta ahora el evento en la capital albaceteña.
“Son retornos económicos muy importantes, valorados por más de 400.000 euros por empresas especializadas”, afirma el director que también apunta a que se ha convertido en una referencia del cine independiente español, debido a sus cifras que lo han convertido en un evento “importante”. “También teníamos que afianzar la filosofía, la personalidad del evento, porque el cine no tiene límites y era algo que debíamos estudiar”, asegura. Y es que, confía en que el evento puede ser una referencia “todavía mucho mayor” gracias al apoyo de los profesionales del audiovisual.
La negociación se ha basado en marcar un plan de futuro común, “indispensable” para reconsiderar que el festival se mantuviese, al igual que que Zamora siguiese siendo director. “Lo que hemos alcanzado es un acuerdo de presente y de futuro del festival, para dotarlo de estabilidad, después de soportar los años de la crisis y abordar lo que realmente puede generar. Necesitábamos un planteamiento mucho más profesional y mucho más serio”, explica.
Historia, mi primer Abycine y más
El festival nació en 1998 bajo el nombre de Festival de Cine Joven de España, hasta que en 2003 surge ya Abycine. El evento se caracterizó por tener “muchísimo peso internacional” y por sus retrospectivas de cineastas que luego han terminado siendo ganadores de otros certámenes. “Lo que nosotros queríamos siempre era trabajar en un concepto que ahora empieza a ser visible y tener más reconocimiento: el cine independiente”, asegura Zamora. También destaca el “descubrimiento” de directores como Nacho Vigalondo o Carlos Vermut ('Magical Girl') que presentó su primer trabajo en Abycine.
“Nunca piensas que llevas 18 años como llevamos en esto. Tirar del carro de un festival es tenso y excitante por un lado, también dificultoso y estás en el desafío finalmente año a año”, asegura. Las actividades para los más jóvenes, Abycinito y mi primer Abyicine las define como una piedra “troncal” de las últimas ediciones que forma parte de la alfabetización audiovisual que quiere llevar a cabo también la iniciativa. “Es fundamental y hemos podido contar con toda la comunidad educativa para ello, diseñando programaciones y actividades que no sólo hacen cantera sino que ofrecen una actividad educativa que no está siempre disponible”, concluye.