Puigdemont, reelegido presidente del Consell de la República con una participación de solo el 10%

Carles Puigdemont ha sido reelegido presidente del Consell de la República al obtener 8.263 votos, el 92,4% de los emitidos, según los resultados provisionales de las elecciones internas. En las votaciones solo han participado 8.941 registrados, lo que supone un 9,94% de participación de un censo total de 89.970 personas, informa la Agència Catalana de Notícies (ACN).

En un comunicado, la entidad ha informado que la segunda candidatura más votada ha sido la del periodista y concejal de Canet de Mar (Primàries), Jordi Castellà, con 493 votos, un 5,5%. En tercer lugar se ha situado al periodista mallorquín Lluís Felipe Lorenzo, con 66 votos, un 0,8%. Por otra parte, 119 personas (1,3%) votaron en blanco. Los resultados son provisionales hasta el día 24 de febrero, a la espera de que la Sindicatura Electoral resuelva alguna incidencia o reclamación.

Puigdemont preside el Consell desde su creación, en 2018, mientras en Catalunya regía el artículo 155. Inicialmente, la entidad jugó a la mimetización con una especie de gobierno paralelo en el exilio. La ficción duró poco, porque Quim Torra se convirtió en president en mayo de 2018, lo que hizo volver a Junts al reconocimiento de hecho de la legitimidad de la Generalitat autonómica.

El Consell siguió adelante como un espacio, decían sus promotores, que permitiría impulsar iniciativas a favor del independentismo fuera del alcance del Estado, al estar radicado en Bélgica, si bien, más que ninguna otra cosa, ha supuesto el refugio de Puigdemont: una entidad al margen de los vaivenes de Junts, que inicialmente fue el nombre de una candidatura del PDeCAT, después una coalición y finalmente ha acabado siendo un solo partido, en el que el expresident tiene la última palabra pero ya no cargo orgánico.

La entidad, convertida en un núcleo de irreductibles de Pugidemont, ha vivido una crisis interna en los últimos meses a raíz de la vuelta de Junts a la estrategia negociadora con el Gobierno. Un grupo de militantes del Consell pidió una votación interna (que perdieron) sobre el bloqueo de la investidura, pero que constató la existencia de una minoría de independentistas movilizados en contra de cualquier posible acuerdo entre Puigdemont y Pedro Sánchez.