Unides Podem, en busca de portavoz parlamentario en las Corts Valencianes

Cerrado el acuerdo de Gobierno valenciano y a la espera de ultimar el segundo escalón del Ejecutivo, Unides Podem-EUPV se enfrenta al reto de elegir a un nuevo portavoz parlamentario. El actual síndic, Rubén Martínez Dalmau, será designado la próxima semana, previsiblemente el lunes como el resto del Ejecutivo, vicepresidente segundo de la Generalitat, cargo que compaginará con el de conseller de Vivienda, Sostenibilidad Energética y Coordinación de Políticas Ambientales.

La ajustada mayoría de los partidos del Botánico, en la que PSPV, Compromís y Unides Podem-EUPV suman 52 diputados frente a los 47 de PP, Ciudadanos y Vox, ha provocado que los grupos lleven semanas meditando si es conveniente que quienes ostenten cargos en el Ejecutivo sigan manteniendo su acta como diputados. Compaginar ambas tareas podría, al margen de no llegar a todo con la misma efectividad, hacer peligrar el avance de las votaciones.

En el caso de Unides Podem, la reflexión tiene, si cabe, más sentido. El grupo cuenta con ocho diputados, así que la ausencia de uno podría ser crítica. A la labor de portavocía hay que añadir el trabajo de las comisiones, ya que estos ocho parlamentarios deben tener representación en las 14 comisiones -unas dos por cabeza-, sin contar las especiales o de investigación que puedan surgir a lo largo de la legislatura. Dalmau es secretario de la mesa de la comisión de Derechos Humanos. En total, una carga de trabajo difícilmente asumible.

Así, desde el partido dan por asegurado que no compatibilizará los cargos de vicepresidente y portavoz parlamentario y ven muy probable que deje el acta. En ese caso, entraría en el parlamento autonómico Naiara Davó, número 4 por Alicante. Davó ha sido concejal en Alcoi junto a Estefanía Blanes, también diputada, y es licenciada en Ciencias Políticas con un máster en Cooperación y experiencia laboral en ONGs en Brasil.

Desde el grupo aseguran que la elección del portavoz “ahora no es lo más urgente” porque queda por cerrar el acuerdo para el segundo escalón del Gobierno (secretarías autonómicas y direcciones generales), cargos para los que Unides Podem tienen en mente a algunos diputados. “Puede haber más cambios en el grupo parlamentario”, además del de Dalmau, apuntan desde la formación morada. El grupo parlamentario tiene esta idea en mente y le quita hierro a la sucesión: “Decidirá el consejo ciudadano. No tenemos la menor intención en convertirlo en un melodrama”.

Algunos creen que Ferrán Martínez, senador en la pasada legislatura, sería buena opción para llevar la voz del grupo parlamentario, aunque sería una idea algo incoherente con la postura del secretario general, Antonio Estañ, que aboga por feminizar el liderazgo del partido. Martínez es actualmente coordinador del grupo parlamentario. La portavocía del grupo podría recaer en Pilar Lima, segunda portavoz adjunta, ya que la primera, Rosa Pérez Garijo, también suena para la conselleria de Transparencia y Calidad Democrática. Nombrar a Lima podría ser un buen gesto del grupo por la inclusión, ya que la parlamentaria es sorda.

Una de las dificultades de la gestión del grupo es que esta legislatura apenas quedan parlamentarios que hayan trabajado durante la anterior. De los 13 diputados del anterior grupo, tras el 28A repiten Cristina Cabedo, vicepresidenta tercera de las Corts, Irene Gómez y Beatriu Gascó. Paradójicamente, el único sin experiencia en la gestión política es Dalmau, experto en constitucionalismo.

El nombre de Gascó suena en los pasillos de las Corts y en los despachos, tanto como para portavoz parlamentaria como para algún cargo en las conselleries con competencias en Medio Ambiente. La diputada alicantina se encargó durante la pasada legislatura de estas cuestiones, consiguiendo que en los últimos presupuestos se aprobara una agencia para combatir el cambio climático. Según el pacto aprobado por Ximo Puig, Mónica Oltra y Rubén Martínez Dalmau, a Unides Podem le corresponderá la dirección de varios departamentos 'verdes', como esta agencia.

Algo que el grupo parlamentario tendrá que ajustar el equilibrio de fuerzas, ya que en caso de marchar Pérez Garijo a la consellería de Transparencia y Calidad Democrática, sólo quedaría un representante de Esquerra Unida en el grupo parlamentario. El resto de miembros de su formación tendrían muy complicado tener representación, ya que figuran en puestos bastante bajos de las listas y tienen por delante a al menos dos candidatos de Podem. Los siguientes de EUPV en las listas son Maria Ángeles Llorente, número 7 por Valencia; Cristian Veses, el 4 por Castellón y Álvaro Castaños, número 7 por Alicante. Con este panorama, no sería extraño que la dirigente de izquierdas no dejara el acta como diputada.