Bioparc prevé iniciar en enero las obras de su nuevo parque fluvial de aventura ambientado en el Extremo Oriente
Una nueva oferta de ocio empezará a tomar forma en València a partir del próximo mes de enero.
Este es el plazo que se han marcado los responsables de Bioparc Valencia para iniciar las obras de su nuevo parque de atracciones de aventura en unos terrenos de 30.000 metros cuadrados contiguos a sus actuales instalaciones, en virtud de la concesión a 50 años otorgada hace 12 años por el Ayuntamiento, en la que ya se recogía la ampliación del parque zoológico con una instalación recreativa complementaria.
El director general de Bioparc, Luis Ángel Martínez, y el presidente de Rain Forest España, José Maldonado, han presentado este miércoles el anteproyecto al alcalde de València, Joan Ribó, y a varios de sus concejales, quienes han urgido a que tramiten los diferentes permisos con la máxima celeridad posible. Maldonado ha comentado que la idea es finalizar el parque para su apertura en marzo de 2022.
Como avanzó eldiario.es, aunque el parque aún no tiene nombre oficial, estará ambientado en los templos de Angkor, una región de Camboya que alojó las sucesivas capitales del Imperio jemer durante su época de esplendor, principalmente entre los siglos IX y XV.
La instalación tendrá una decena de atracciones. Entre ellas destacan un 'cañoning' (barranquismo) de 24 metros de altura (equivalente a un edificio de seis pisos) que incluirá 13 saltos sobre 13 estanques con rapel y tirolina. Además, incluirá un río lento de 500 metros para piraguas, otro rápido,un conjunto de atracciones de adrenalina con una altura de 20 metros de altura para deslizarse en flotadores para cuatro personas (solo existe uno similar en Madrid), un circuito tipo 'racer' de competición con dos calles, un conjunto de actividades con toboganes para deslizarse en flotadores de dos personas, una playa de olas y dos zonas de niños, una para edades entre cero y seis años, y otra para entre seis y doce años.
En cuanto al funcionamiento del parque, hay una previsión de 800.000 visitantes anuales con la idea de que pueda estar abierto todo el año aprovechando el río lento con piraguas, así como el canyoning puesto que incluirá neoprenos para los visitantes.
El parque fluvial incluirá un sistema de abastecimiento de agua que permitirá el aprocheamiento máximo del agua de la lluvia que se recogerá, se almacenará y se depurará para su uso, aunque también necesitará unos mínimos aportes.
Recuperación de alquerías
Maldonado ha explicado que el proyecto prevé la recuperación del conjunto de alquerías del Pouet ubicadas en el entorno.
La idea de la Alquería del Rey es que albergue simultáneamente la sede de la Fundación Bioparc y una zona expositiva de recreación de los usos y costumbres de esta alquería.
El conjunto está integrado por la Alquería del Rey, que es la principal, otra que es un edificio anexo dedicado a la fabricación de telares y seda, y un conjunto de construcciones que en su origen eran barracas que es lo que se conoce como la casa de Figuerols.
Otra de las ideas que se estudian es la de recrear la gusanera que albergó en su momento la Alquería del Rey, mediante un criadero de gusanos de seda, un paseo con moreras para suministrar a los gusanos y la elaboración de talleres para visitas de colegios.
