Desvelando el misterio de las vitrinas luminosas de la plaza de Lavapiés

El pasado 20 de febrero aterrizaron en la plaza de Lavapiés cinco grandes vitrinas transparentes conteniendo las siguientes palabras y frases cortas: “Te admiro”, “Milagro”, “Eres un milagro”, “Floreces”, “Te abres”. 

Sin más explicación ni rastro alguno de su procedencia se encienden por las noches sin que ello sirva para arrojar luz sobre su porqué y allí permanecerán hasta el próximo día 12 de marzo.

Su llegada al barrio coincidió con las grandes citas del arte en Madrid que crecen al calor de la feria ARCO y los vecinos de la zona pensaron que algo tendría que ver con lo artístico, aunque a muchos de ellos les cueste ver esa condición -tal y como no han tardado en expresar a través de las redes sociales- en unos armatostes que tienen un aire de extinta cabina telefónica.

Con ARCO no han tenido nada que ver y la coincidencia en fechas ha sido pura casualidad, según explican a Somos Lavapiés desde el distrito Centro. De lo que sí se trata es de una acción artística que busca “acercar el arte contemporáneo al pueblo de Madrid”, según Fundación El Instante, responsable de una iniciativa comisariada por Manuel Fontán, director de Museos y Exposiciones de la Fundación March, y en la que está involucrado el pintor José María Sicilia.

Tampoco se enmarca esta en el plan del Ayuntamiento de Madrid de dinamizar las plazas de Embajadores: “Ayuda pero lo ha propuesto la fundación, no lo ha buscado la Junta de Centro”, aseguran fuentes municipales.

'Las vitrinas de Madrid'

Las vitrinas de la plaza de Lavapiés forman parte de 'Las Vitrinas de Madrid', un proyecto para intervenir en el espacio público de la capital “desde el punto de vista del arte, la creación y las ideas”.

“Hay que pensar en Madrid como la ciudad abierta que es y que necesita poner en valor su creación y sus ideas de una manera visible. Queremos crear situaciones a través de vitrinas donde la mirada hacia el arte y hacia la vida se confundan (...) Por eso ofrecemos contenedores y un servicio para coordinar-comisariado para los contenidos. Pensamos hacer una reflexión sobre los barrios de Madrid de forma que podamos proyectarlos al futuro a través de sus pasados y presentes”, indican sobre el proyecto desde El Instante, habiendo elegido Lavapiés para empezar con él “por ser un importante eje de movilidad, a la que hay que añadir su condición de crisol social, de espacio de convivencia, de expresión y comunicación”.

“Vamos a hablar con la lengua de los afectos, en la calle con el ruido urbano, no vamos a inventar, vamos a descubrir, vamos a descubrir la realidad, vamos a aumentar nuestra sensibilidad para con la realidad”, explican en su página web los organizadores de la acción, con los que a este periódico le ha sido imposible contactar, a pesar de múltiples intentos.

Loas de un arte conceptual paracaidista

¿Serían entonces las misteriosas vitrinas luminosas aparecidas en Lavapiés una loa transparente del barrio? La acción, de la que nadie de la zona sabe nada, tiene algo de arte paracaidista, ese que aterriza en un lugar sin contar realmente con el territorio y con quienes lo habitan, y una conceptualidad naif, pero ya se sabe lo inescrutables que son los caminos de la creación artística.

¿Y esta mierda en la plaza de Lavapiés? pic.twitter.com/QSR3CiqCuq

— @cuadernista@mastodon.social (@cuadernista) February 21, 2023

La Fundación el Instante nació en 2017 “con la voluntad de llevar y hacer llevar a cabo una reflexión sobre el tiempo presente en nuestras vidas”. Su sede y espacio cultural se encuentra en Arganzuela, en la calle Palos de la Frontera.