Fin a la 'barra libre fiscal' en Airbnb: tendrá que entregar a Hacienda el NIF de todos sus usuarios e ingresos detallados

El Ministerio de Hacienda ultima un decreto para controlar fiscalmente todos los ingresos originados en España por el alquiler de viviendas para uso turístico. Lo hará exigiendo a todas las plataformas que hacen de intermediarias -Airbnb, Windu, Rentalia o Booking- datos pormenorizados de todos los propietarios, gestores y usuarios de este servicio que mueve actualmente cientos de millones de euros en España.

Según el texto propuesto por Hacienda, las plataformas tendrán que detallar el titular de cada vivienda alquilada para el turismo, la persona que gestiona dicho alquiler, así como la referencia catastral del inmueble. Todo acompañado del número de identificación fiscal y de la razón social, en el caso de que lo gestione una empresa. Además, las compañías habrán de presentar una declaración con el número de días que ha sido alquilada la vivienda y el importe que se ha cobrado por el servicio.

También será necesario identificar a cada uno de los clientes de este servicio, siguiendo un modelo que detallará en breve el ministerio, pero que seguirá previsiblemente el modelo hotelero, que exige en un documento identificativo a cada persona que se aloja en sus instalaciones en el momento de llegar a ellas.

Hasta el momento, las plataformas como Airbnb se limitaban a recomendar a sus usuarios que cumplieran sus obligaciones legales y fiscales, pero sin mantener una labor de vigilancia y también sin comprobar si los usuarios que ponían en alquiler vacacional sus casas lo hacían legalmente. Esto ha motivado casos como los que se han vivido en Barcelona, ciudad en la que empresas depredadoras de alquileres están realquilando viviendas que rentan a su nombre a largo plazo y luego las introducen ilegalmente en el mercado del alquiler vacacional, ante la permisividad de Airbnb y la impotencia de sus propietarios, que incluso se ven obligados a okupar su propia casa para recuperar el control sobre ella.

Airbnb: un negocio de 18,6 millones solo en el distrito Centro

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El decreto de Hacienda -en periodo de información hasta el 21 de julio- llega en mitad del verano, en pleno auge de una temporada turística durante la que muchos propietarios del centro de Madrid están poniendo en alquiler vacacional sus viviendas. El objetivo del ministerio que dirige Montoro es el de fiscalizar hasta el último de estos alquileres para que parte del enorme negocio de plataformas como Airbnb acabe en las arcas públicas.

Solo en el distrito Centro, esta compañía facturó durante el año 2016 unos 18,6 millones de euros, según un estudio publicado recientemente por el Ayuntamiento de Madrid. Un negocio que ha crecido de forma exponencial en un mercado sin regulación y propenso hasta ahora a la evasión fiscal.

Este mismo estudio municipal detallaba cómo la gran mayoría de pisos alquilados por Airbnb no son rentables si se asumen todos los compromisos fiscales del propietario.

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Ramón

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