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La DYA se moviliza para evitar el alcohol al volante durante la Aste Nagusia

Bruno Sans

Bilbao —

En Aste Nagusia la fiesta se riega con alcohol, y a veces se desmadra. Y los excesos pueden resultar peligrosos. Por ello, la DYA afronta por séptimo año consecutivo la campaña 'Alk-Stop' para evitar que quienes hayan bebido cojan el coche para regresar a casa.

Como parte del programa, la asociación de ayuda en carretera repartirá 10.000 pulseras amarillas con el lema 'Alk-Stop' serigrafiado en negro. Son menos que las que ofrecían en anteriores ediciones, porque “tenemos menos recursos que otros años, y los que tenemos los dedicamos a atender a las personas”, argumenta su portavoz. Los brazaletes se podrán conseguir durante toda la semana grande en la sede de la DYA y en su puesto de socorro del recinto festivo, y tanto lunes como jueves frente al teatro Arriaga.

“Es el quinto año que repartimos las pulseras, y poco a poco se van convirtiendo en un elemento indispensable de las fiestas”, comenta el portavoz de DYA, “aunque aún no sean tan imprescindibles como el pañuelo”. Quienes las llevan puestas demuestran su responsabilidad, y pueden ayudar a concienciar a los demás.

Además, para que el mensaje cale en la sociedad, organizan un concurso para elegir a 'Miss y Mister Seguridad Vial', un certamen de belleza que busca la 'belleza interior' de las personas. “Porque no hay nada más feo que coger el coche después de haber bebido, ni nada más bello que respetar la vida de los demás”. Para participar, basta con enviar una fotografía a 'Alk-Stop' con la pulsera puesta.

Aunque año a año las muertes en carretera se reducen, el alcohol está presente en más de la mitad de los accidentes mortales. “Esperemos que no se generen muchas noticias durante estos nueves días”.

El dispositivo de la DYA para toda la Aste Nagusia contará con 80 ambulancias y alrededor de 260 técnicos sanitarios. En la pasada edición de las fiestas se tuvieron que realizar casi 100 traslados hospitalarios y, aunque los responsables no se atreven a hacer previsiones, esperan que este año sean menos. “En fiestas casi todos bebemos, muchos conducimos, pero absolutamente todos debemos dejar el coche cuando bebemos”, concluye el portavoz de la DYA.

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