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Los vecinos exigen este año soluciones al ruido, al botellón y al exceso de terrazas

La presidenta de la Federación de Vecinos, María José Broseta, en el centro de la imagen junto a Joan Ribó, en una reciente reunión

Carlos Navarro Castelló

La Federación de Vecinos de Valencia, con su presidenta María José Broseta a la cabeza, ha hecho un balance de lo que ha sido el año 2016 a nivel de gestión por parte del nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Valencia.

Al respecto, Broseta ha comentado que hay que tener en cuenta que “2016 ha sido el primer año completo de Gobierno de los nuevos dirigentes tras 24 años del PP, 20 de ellos con mayoría absoluta, por lo que es evidente que algunos problemas enquistados desde hace años no se pueden cambiar de la noche a la mañana”.

En este sentido, Broseta ha considerado como positivo la mayor apertura del Ayuntamiento a la participación ciudadana. En este sentido, ha aplaudido la creación del nuevo reglamento de participación que se está elaborando y ha recordado que la Federación entregará una propuesta al Ayuntamiento.

Sin embargo, la dirigente vecinal ha comentado que los procesos participativos abiertos se deben mejorar para que integren a más vecinos/as.

Además, ha considerado positivos los presupuestos participativos, pero ha considerado “insuficiente” la partida destinada a repartir entre los distritos, así como las condiciones impuestas para que los proyectos vecinales vean la luz: “Las condiciones impuestas para participar son excesivamente complejas y farragosas, lo que en lugar de estimular la participación crea rechazo”.

Además, ha criticado los retrasos para realizar las obras aprobadas para 2016, muchas de las cuales aún no han empezado a ejecutarse. Broseta ha pedido más apoyo al movimiento histórico vecinal como red voluntaria en todos los barrios de forma estable y comprometida.

Problemas de convivencia en los barrios

Por otra parte, la presidenta de la Federación ha lamentado que no se haya tomado ninguna medida efectiva contra uno de los mayores problemas que sufren los barrios: La contaminación acústica derivada del botellón, los apartamentos turísticos y las terrazas, entre otros focos, que sigue siendo una asignatura pendiente que va a más.

Broseta ha comentado que se tiene que abordar de forma continuada con medidas contundentes porque es un problema de salud pública.

Al respecto, ha recordado que en la última reunión con el alcalde de Valencia, Joan Ribó, en la que abordaron este tema, propusieron, entre otras medidas, la creación de un observatorio permanente que integrara a todos los actores relacionados con el ocio y el ruido y que se reuniera de forma periódica para proponer actuaciones y evaluar sus resultados.

Movilidad

Según la dirigente vecinal, en este aspecto ha sido un año convulso. La Federación siempre ha mantenido que el peatón debe ser el protagonista y las medidas deben ir encaminadas a mejorar la movilidad de viandantes y personas con movilidad reducida.

Después, la entidad entiende que hay que fomentar y mejorar el transporte público y el ciclista, siempre respetando las ordenanzas: “Las aceras deben ser para los peatones, no para las terrazas ni para ciclistas, que deben ir por sus carriles o por la calzada”.

En este sentido, Broseta ha valorado positivamente que se haga carril bici, pero ha puntualizado que se debe hacer con consulta previa a los vecinos: “Ha habido casos como en Beteró o Malilla en los que empezaron las obras y los vecinos y vecinas no sabían por dónde iba a discurrir el carril bici, una situación que habrá que mejorar en el nuevo año”.

En el caso de la EMT, según la dirigente vecinal, la remodelación de líneas no se ha hecho de forma consensuada y eso ha generado miles de quejas (más de 5.000) que han recogido las asociaciones: “Esperamos que eso cambie este año y que se consulte antes de hacer nuevos cambios”.

Además, no ha servido para mejorar las frecuencias de paso. Las esperas son las mismas o superiores a las que había antes. Por ejemplo, esperas de 25 minutos para la línea 28 en plena calle Pintor Sorolla un día laborable en hora punta.

En este sentido, Broseta ha instado a que se saquen más autobuses a la circulación en las líneas deficitarias, única fórmula efectiva para reducir las esperas de forma significativa.

En todo caso, las futuras reordenaciones deberán priorizar las conexiones de los barrios con servicios públicos como sus centros de salud y sus hospitales de referencia, algo de lo que carecen por ejemplo Malilla y Ruzafa: “No estamos en contra de que se remodelen líneas, sino de cómo se ha hecho”, ha comentado Broseta.

Por otra parte, “urge acabar como sea la línea T2 de FGV y hay que llegar a un consenso con los vecinos/as de las pedanías del sur sobre los cambios de la CV-500 que tantas quejas está causando; este es otro ejemplo de falta de participación e información a la ciudadanía”, ha explicado.

Otros asuntos destacados y polémicos han sido el doble sentido de Barón de Cárcer, la peatonalización del entorno de la Lonja o la eliminación de aparcamiento en la avenida de Aragón.

En todos los casos ha habido un escaso proceso participativo antes de tomar las decisiones. En el primero de ellos, según Brostea, es evidente que hay que mejorar la señalización y las medidas de seguridad para evitar accidentes y si es preceptivo, hacer las evaluaciones de riesgo que han demandado los sindicatos para actuar según los resultados de dichos informes.

En cuanto a la actuación en el entorno de la Lonja, en la práctica solo ha servido para que el espacio liberado se llene de terrazas y en horas punta se crean grandes atascos en María Cristina y plaza del Mercado.

La Federación entiende que ha habido “precipitación” ya que se ha actuado “antes de abrir el aparcamiento del Mercado y de dar a los vecinos/as las tarjetas de residentes”.

Además, dicen, no se consultó con los servicios sanitarios de emergencias ni se les dio llaves para poder retirar los pilones que se han instalado en calles como Bolseria o Caballeros.

Quizás hubiera sido más lógico primero censar y dar las tarjetas a todos los residentes, después abrir el parking de Ciudad de Brujas y por último proceder a restringir el tráfico.

El lío puede ser mayor, según la Federación, cuando se instalen las cámaras para controlar los accesos: “El concejal Grezzi debe explicar muy bien a los vecinos cómo va a funcionar este sistema para evitar problemas en el futuro”, ha dicho Broseta.

En cuanto a la eliminación de aparcamiento en la avenida de Aragón, la Federación exige que se ofrezcan alternativas puesto que calles cercanas como Bélgica o Polo y Peyrolón están saturadas y hay déficit de aparcamiento.

Según Broseta, “no parece propio de un gobierno de izquierdas el coaccionar a los vecinos para que se alquilen o compren plazas privadas a unos precios que están desorbitados y que mucha gente no puede pagar”.

Fachada marítima

Según la entidad vecinal, no ha habido grandes avances ni el Cabanyal, ni en Nazaret ni en el impulso a la Dársena que se esperaba.

La Federación espera que en 2017 se concreten los anuncios sobre las mejoras urbanísticas y de convivencia en el Cabanyal y que se materialicen los compromisos del puerto con Nazaret.

Además, se debe buscar una solución definitiva para dar un uso público a la zona del circuito de Fórmula 1 que actualmente divide los barrios de El Grao y Nazaret.

En cuanto a las playas, se debe contemplar los retrocesos y avances de las playas para que no suceda como en el pasado temporal en el Saler o en Pinedo, donde el mar se comió la arena y hubo desperfectos que pueden afectar a las viviendas de los vecinos.

Limpieza y parques y jardines

En 2016 ha quedado patente que el presupuesto era insuficiente. Ha habido muchas quejas por falta de limpieza y de poda.

La dirigente vecinal ha considerado positivo que se haya previsto un incremento en ambas partidas y habrá que esperar para ver si es suficiente el aumento de barrido y baldeo.

Grandes infraestructuras

La Federación ve con optimismo el avance en las obras del Parque Central, pero recuerda que están por acordar los usos de las naves rehabilitadas, por lo que espera que este aspecto se concrete con las asociaciones vecinales implicados a lo largo del presente año.

En este sentido, la entidad considera irrenunciable el soterramiento de las vías (incluido en Serrería para dar continuidad a la Alameda y avenida Francia) y el túnel pasante para poder completar toda la zona verde prevista.

Por otra parte, Broseta ha instado al alcalde de Valencia, Joan Ribó, a que se reúna con los dirigentes del Valencia C. F. para conocer sus planes con respecto al nuevo estadio y en cualquier caso, si no tienen previsto reiniciar las obras a corto plazo, que les urja a cumplir sus compromisos con el barrio de Benicalap a lo largo del presente ejercicio.

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